A la hora de analizar nuestros encuentros y desencuentros la antropología nos brinda una herramienta eficaz, no utiliza el concepto de crisis sino el de tránsito. Y esto para entender ciertos procesos es fundamental. La ruptura de redes sociales donde las diferencias se desconocen, donde no pareciera que no hay manera de integrarlas, conlleva que cada uno se repliegue hacia sí mismo y así desconozca todo espacio de contacto por cercano que estuviere. ¿Porqué digo esto? Porque si abrimos las páginas del diario, si nos movemos entre las redes de Internet, la proliferación de espacios- desde las vidrieras de bancos y financieras hasta los lobbys de los nuevos hoteles- y acciones – desde las tradicionales muestras en los espacios institucionales hasta las nuevas propuestas en espacios no convencionales -es asombrosa. Como es tam bién asombroso el desconocimiento que todos los hacedores, como se dice por aquí, tienen de lo que hace el otro. Este estado de explosión creativa donde todos los lugares son pocos para mostrar y compartir. Vayan algunos como ejemplo. No son todos, ni mucho menos.

Magdalena Benegas presenta sus de obras de diversas técnicas como: colagraphs, xilografías, monotipias y lápiz color, en el espacio de arte de Hotel Hyatt, en tanto
Pascual Marquet muestra óleos en el lobby de Peumahué apart hotel de Borrego y
Andrés Casciani exhibe dibujos y pinturas, en las salas culturales de la Caja de la Salud y en Espacio Modigliani encontramos “Diversidad” Pinturas de Aníbal Anganuzzi.

Los espacios institucionales dan lugar a nuevas experiencias desde variados ángulos. En la Alianza Francesa, continúa “Los glaciares, memoria del clima”, una exposición de fotografías en torno al libro de Bernard Francou y de Christian Vincent.
El MMAM (Museo Municipal de Arte Moderno) expande su espacio para hacer lugar a “Viaje a la conciencia - Guerra y genocidio” de Alberto Mariotti, a “Futuro imperfecto” de Fernando Jerez, además las pinturas, acrílicos, fotomontajes, mapas, planos superpuestos, color y dibujo exhibición de Omar Jury y Paola Barrera.

El ECA (Espacio Contemporáneo de Arte) se juega por la habitabilidad del arte y espacio lúdico, con la muestra “El mundo según Mafalda”, un gigantesco viaje al interior de una historieta inolvidable, entrañable, famosa por décadas. Visitada por cientos de personas -chicos y grandes- la exposición invita al asombro y la nostalgia. En tanto en el subsuelo conviven con su visión lúdica las pinturas de Soledad Delgado y un Charlie Escoriza que apuesta a una reflexión sobre la nutrición con “Madre nutricia” y las instalaciones de Lili Fiallo “Aca toy” y de Mariela Vicente “Mundo oruga”, los juguetes de Tachuela, Federico Archidiácono, Eleonora y Débora Costa. Objetos que se pueden tocar, paredes en las que se puede dibujar con lápices gigantes… Mientras la planta baja y el subsuelo se mantienen con una estabilidad de dos meses en la planta alta se desarrolla un torbellino de actividades: “10 pinturas, 3 artistas un legado”, un proyecto sociocultural a en homenaje a la obra del Padre Contreras, que culminó en una subasta, en la que insólitamente se vendió ¡todo!. El beneficio fue al comedor de la obra señalada. Luego se sucedió “Tinta y Papel” en su segunda edición en homenaje al día del escritor, donde diseñadores locales trabajaron en función de seis de las obras literarias de las hermanas Ocampo –Victoria y Silvina. Y culmina con la performance “Junio con tutti”, donde el músico italiano Enzo Rocco, el elenco de danza Teatro El Arbol, e integrantes de la Escuela de fotografía del ECA, compartieron una semana de trabajo de un singular método de improvisación interdisciplinaria. El resultado fue de alto voltaje artístico donde todos los sentidos se vieron estimulados en una especie de espectáculo total. Organizado por las productoras Talío-Talío que una vez más muestran como en estos lugares la voluntad de hacer supera las más variadas barreras.

Y en este hacer de la nada, o con lo que nos parece tan poco, es que reclamo la atención, para contemplar como se despliegan estas conductas generativas de transiciones hacia nuevos tiempos, hacia nuevos espacios socioculturales que están operando a manera de resignificaciones creativas y operativas de rituales de pasaje.