Las jornadas previas al receso invernal, que como hemos señalado en varias oportunidades también alcanza, inexplicablemente, al mercado de arte, fueron muy bien aprovechadas por algunos operadores que resolvieron “jugar fichas grandes”. Fue así como, en la primera semana de julio pusieron sobre tarima obras que respondieron a lo que la plaza estaba exigiendo: calidad indiscutida, “frescas” en términos de mercado, y con bases tan realistas como fue posible obtener de sus remitentes.

En sólo tres jornadas de martillo, Azur, estrenando nueva sala, Arroyo y Roldán, en ese orden, concretaron 228 ventas por valor de 1,5 millones de dólares. Cada una de estas casas con sus características, particularidades y dimensiones propias, unidas a la hora de la estadística, representaron la semana más brillante de la actual temporada de subastas de arte. Los valores más significativos alcanzados en esos días de julio pueden verse en el cuadro de resultados que acompaña estas líneas.

Un clima de cierta euforia ya era perceptible en las salas momentos antes de que los martillos iniciaran sus rituales de la puja y la adjudicación. Incluso algunos rostros nuevos, tan esperados por los operadores, ponían su cuota de expectativa. Y no defraudaron, ya que algunas de las operaciones más relevantes respondieron a esas manos aún no reconocibles.

A la hora del análisis, un cierto sesgo financiero pareciera signar a estos capitales que incursionan en nuestro mercado. Un adecuado nivel de liquidez, unido a insatisfactorios rindes en colocaciones más ortodoxas, llevan a la búsqueda de otros ámbitos de inversión. Y el arte aquí aparece, con sus réditos adicionales de disfrute estético y prestigio social. A ningún adquirente de valores mobiliarios se le ocurriría disponer de un tiempo para leer y releer el correspondiente certificado de tenencia, y tampoco pareciera ser esa compra un tema convocante a la hora de reunirse con amigos. No hace falta ser demasiado imaginativo para suponer lo que, en este sentido, suelen hacer los compradores de una obra de arte…

Claro que, del mismo modo que ninguno de nosotros operaría en los mercados financieros o de commodities sin un razonable nivel de asesoramiento, sería del caso el recomendar a quienes hoy se aproximan a la plaza del arte el que concurran al aporte y acompañamiento de especialistas y consultores. El mercado tiene un cierto nivel de trasparencia, pero nunca está de más el ayudarlo a que lo eleve. Tras una exhaustiva y profesional labor de análisis de una obra a la venta, sus antecedentes, legitimidad y calidades, así como las de su autor, incluyendo su posible proyección a futuro y eludiendo modas que pueden ser efímeras y cotizaciones que huelen a especulación, la inversión en arte rodará por caminos más seguros y confiables.

Asumir que en el mercado del arte el corto plazo no existe será además una muy buena pauta básica para quienes hoy consideramos bienvenidos a esta plaza.

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VALORES MÁS ALTOS EN LAS SUBASTAS DE JULIO DE 2010
(expresados en dólares)

Autor / Título / Medidas / Lugar de venta / U$S

KOSICE, Gyula / Hidroactividad / 156x156 / Roldán / 58.290
MACCIO, Rómulo / Por fuera y por dentro / 120x120 / Roldán / 56.050
QUINQUELA MARTIN,B. / Niebla en la Boca / 80x90 / Azur / 43.830
FIGARI, Pedro / La reina / 49x62 / Arroyo / 41.480
CARPANI, Ricardo / Obreros / 130x200 / Arroyo / 32.510
NOE, Luis Felipe / Percepción occidental / 114x190 / Roldán / 31.390
SOLDI, Raúl / Niña / 85x60 / Arroyo / 29.150
FORTE, Vicente / Serie de Los Pájaros / 113x195 / Arroyo / 25.785
DEIRA, Ernesto / Personajes / 96x144 / Roldán / 24.660
QUINQUELA MARTIN,B. / Rincón de Palermo / 50x60 / Arroyo / 24.100

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Fuente: CONSULTART/dgb