Tucumán 712, casi esquina Maipú (C.A.B.A)

Texto curatorial
Hay formas de amor que no se explican, se recuerdan.
No porque hayan sido grandes gestos, sino porque dejaron una huella tibia en la memoria, como quien posa la mano sobre el hombro sin decir palabra. A veces creemos que el cariño necesita declaración, pero muchas veces basta con un acto sencillo —preparar la comida, arreglar algo que se rompió, preguntar cómo fue todo— para saber que alguien estuvo ahí, queriéndonos.
Esta muestra parte de una pregunta simple y, al mismo tiempo, compleja: ¿en qué momento supimos que nos querían? Y no solo desde el amor romántico, sino desde esa red silenciosa de gestos, hábitos y objetos que configuran el lenguaje del afecto. Lo que se hace con las manos, lo que se hereda sin decir, lo que se cuida en silencio.
Quizás querer sea, también, sostener la vida del otro sin pedir nada a cambio.
Hacer lugar. Dar forma. Repetir un gesto como si fuera un rezo cotidiano. En una época donde el amor se confunde con la urgencia o la imagen, esta muestra propone volver a lo esencial: la presencia encarnada, la memoria afectiva, el vínculo como acto de creación.
“Cuando supe que me querían” no busca dar respuestas, sino abrir el espacio para que cada quien reconozca esos momentos en los que fue tocado por algo más grande que sí mismo.
Algo que no se impone, pero transforma.
Algo que no se ve, pero sostiene.
El arte, en este contexto, no es solo representación: es registro vivo de lo que nos constituye. Porque hay cosas que solo se entienden cuando el cuerpo las recuerda. Y porque, a veces, saber que nos quieren es también empezar a habitar el mundo de otro modo.
Curaduría: Rocío Koenig, Matías Orzi, Berenice Desmond
Texto: Berenice Desmond
La muestra se podrá visitar desde el 25 de abril a las 18hs hasta el 07 de mayo en Galería Palermo H, Tucuman 712 CABA.
Días y horarios de visita: Lunes a viernes de 10 a 18hs. Sábados de 10 a 13hs
Entrada libre y gratuita