Arte al Día recorrió la muestra “Pasado-Presente”, que se exhibe en el Espacio de Arte de Fundación Telefónica, y dialogó con su curadora, Christine Van Assche, para conocer esta propuesta expositiva que recorre momentos fundamentales de la historia de la imagen y el sonido, y cristaliza renovadoras experiencias artísticas. Una muestra que no sólo invita a ver, sino también a participar e intervenir con el cuerpo y la mente.

¿Cómo está integrada la Colección Nuevos Medios del Centro Pompidou?
La colección del Centro Pompidou da testimonio de medio siglo de historia de la imagen y el sonido y refleja los grandes movimientos del arte contemporáneo, desde las performances hasta la expresión corporal, pasando por el arte minimalista, el arte conceptual, el postconceptual y el postcolonial. La colección cuenta con obras que datan desde 1960 hasta la actualidad, reuniendo un total de 1700 piezas que incluyen 110 instalaciones multimedia, numerosos videos, cintas de audio, CD-ROM y sitios Web en su mayoría creados por artistas visuales y de otras disciplinas artísticas.

Dada la magnitud de esta colección, ¿cuántas obras se exhiben en la muestra y cómo fue el proceso de selección?
En total seleccionamos ocho instalaciones, que van desde 1970 hasta 2002. De modo que fue un proceso complejo, teniendo en cuenta la cantidad de obras que forman parte de la colección. La Fundación Telefónica nos pidió que eligiéramos obras principalmente históricas, que no hubieran sido expuestas en Argentina. De modo que al recorrer la muestra, vemos como los artistas van saliendo de planteos tecnológicos como el cubo negro y el cubo blanco, y pasan a la utilización de pantallas planas, virando hacia una producción muy cultural y existencial. A partir de este enfoque, presentamos artistas que cuentan con una importante trayectoria, como Nam June Paik, Bruce Nauman y Vito Acconci, y otros más jóvenes, como Zineb Sedira, o el holandés Aernout Mik, que acaba de hacer una exposición muy grande en el MOMA de Nueva York.

Además de pensar en un recorrido histórico, ¿qué otros criterios tuvieron en cuenta para armar la muestra?
La idea era mostrar distintas tendencias conceptuales a través de estas obras, que siempre requieren una participación física y mental del espectador. Por ejemplo, del célebre artista coreano pionero del video, Nam June Paik, se exhibe Moon is the Oldest TV, una video instalación de 1965. Es la obra más antigua de la exposición y plantea una reacción contra la televisión y un rechazo a los distintos parámetros asociados a este medio, como la transmisión en vivo, grabación, repetición y flujo televisivo, contraponiendo imágenes que muestran las distintas fases de la luna. Es una obra que invita a tomar una actitud muy zen, contemplativa y filosófica.

Al tomar como eje el pasado y el presente, se hace inevitable tocar el tema de la memoria…
Ese es otro de los ejes de esta muestra. Y es que las nuevas tecnologías muchas veces sirven para hablar de la memoria. En esa órbita hay una instalación de Thierry Kuntzel de 1984, que trabaja sobre la memoria personal e individual, y también hay una obra interactiva multimedia de Chris Marker, Immemory, que es el primer proyecto de CD-ROM realizado por este artista francés. Su idea es establecer una geografía trazando un mapa de un país imaginario a través de una vorágine de imágenes y postales que ha ido tomando y eligiendo mediante estados de ánimo pasajeros. El artista describe esta obra como “una visita guiada a la memoria”, pero al mismo tiempo ofrece al visitante la oportunidad de establecer un recorrido azaroso y a sustituir con sus imágenes y recuerdos, las memorias del propio artista.

¿Qué lugar ocupan en la muestra los temas socio culturales?
En esa dirección tenemos tres obras: primero una instalación sonora de Vito Acconci, The american gift, de 1976, que habla de la relación entre Norteamérica y Europa; también tenemos la instalación Park, de Aernout Mik que nos muestra una sociedad decadente a través de un video que funciona como una gran escultura; y la obra más reciente presentada en esta muestra, que es Mother Tonge, una video instalación de 2002 que realizó la artista Zineb Sedira, en la que nos muestra la relación Europa y sus ex colonias. Se trata de una artista francesa de padres argelinos que vive en Londres y reflexiona sobre el tema de la comunicación mediante tres plasmas en los que la artista, su madre y su hija mantienen una conversación acerca de los recuerdos de la infancia, intercambio que se ve dificultado por el uso de diferentes idiomas.

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Más info
Hasta el 25 de septiembre
Fundación Telefónica,
Arenales 1540