Pero, ¿cómo hacer visible una publicación gráfica en una exhibición que sintetice todos sus aspectos conceptuales y de cuenta de su interés pluridisciplinario? ¿Cómo recrear 45 números de un periódico integrado por textos, críticas y comentarios, que condensaron el pensamiento y la perspectiva de un grupo de intelectuales y escritores que luego serían grandes figuras de nuestra literatura?

El desafío no es menor. Desplegada en un montaje didáctico y dinámico, esta muestra permite revivir el fenómeno Martín Fierro en forma “tridimensional” y Arte al Día realizó un recorrido con su curador, Sergio Baur, para conocer en detalle los lineamientos de una propuesta expositiva integrada por una notable diversidad de piezas, entre libros, documentos, publicaciones, pinturas, esculturas, grabados, dibujos, videos y fotografías, que permiten reconstruir el pulso de esta publicación, en la década del 20.

AAD: ¿Cómo se define Martín Fierro?
SB: Fue un periódico literario quincenal que se publicó de 1924 a 1927 y que tuvo mucha incidencia en la transformación literaria y poética del país, además de ser receptor de todas las corrientes estéticas, tanto argentinas como extranjeras que se desarrollaron en esa época. Los jóvenes que regresaban de distintos viajes por Europa, entre 1922 y 1923, tuvieron un papel preponderante en la configuración de una vanguardia reflejada en la revista, como los hermanos Borges (vinculados al ultraísmo), Pettoruti (futurismo), Pablo Curatella Manes y Xul Solar.

AAD: ¿Cómo surge la idea de hacer una muestra sobre Martín Fierro en el MNBA?
SB: Yo había investigado el tema y surgió a partir de la idea de hacer un análisis de colección permanente del MNBA. Luego al hacer una relectura del Bicentenario, el museo planificó cuatro grandes exposiciones para el año. Una de ellas, la que tuviera mayor contenido histórico y abarcara no sólo la plástica, sino también la literatura, el cine, las artes decorativas era ésta. Se pensó en la idea de la exposición del periódico Martín Fierro porque es como un movimiento de amplia correspondencia artística.
AAD: ¿Cómo seleccionaron las obras y cuál es el planteamiento ideológico de la muestra?
SB: Fuimos seleccionando obras del patrimonio artístico del museo y préstamos de colecciones públicas y privadas nacionales y extranjeras. La idea fue realizar una lectura y diálogo de los principios estéticos de la publicación, relacionando a los referentes del arte argentino de vanguardia con algunos artistas internacionales, altamente estimados a lo largo de la vida de esta revista literaria. De esta manera se exhibe un conjunto de cien obras de Xul Solar, Emilio Pettoruti, Norah Borges, Alfredo Guttero, Raquel Forner, Aquiles Badi, Horacio Butler, Héctor Basaldúa, Thibon de Libian, Paul Gaugain, Pablo Picasso, Carlo Carrá, Marie Laurencin, Pedro Figari y Julio Castellanos, entre otros.

AAD: En la revista se publicaron numerosas críticas de libros contemporáneos. ¿Cómo se materializó en la muestra ese espíritu de renovación literaria?
SB: Martín Fierro hizo aproximadamente 90 críticas literarias en sus cuatro años, redactadas por los mejores escritores del momento como Borges, Marechal, entre otros. Y para establecer un ordenamiento, lo que se hizo con el diseño del departamento de museografía, es una línea de tiempo que se ve en la parte inferior de la pared (a lo largo de una especie de túnel) donde se indica de qué año y a qué número corresponde cada uno de los libros que se exhibe. Son todas ediciones originales contemporáneas a la revista. Hay grandes ejemplares de la literatura, aunque no todos los libros expuestos fueron elogiados por Martín Fierro. Muchos de ellos fueron criticados sin piedad. Pero la idea es que el visitante tenga la posibilidad de tener el contacto original con la obra.