Boneo investiga con las formas cóncavas y convexas, creando volúmenes y sugiriendo poéticos anti-volúmenes en los que aparecen efectos como las transparencias y aprovechando al máximo la fuerza expresiva del mármol.
La línea envolvente y las texturas trabajadas a cincel son otra característica distintiva de su obra reciente. Así, en una misma escultura, una superficie esmerilada y astillada se contrapone con otra lisa y suave, que es plácidamente acariciada por la mirada del espectador y, ambas, ponen al descubierto la ductilidad del alma femenina, en la que conviven la fortaleza y la vulnerabilidad.
Las esculturas de la artista argentina podrán verse por primera vez en la ciudad de Venecia, en el espacio de exposiciones Ai Miracoli. La muestra está integrada por 15 obras, entre mármoles, maderas y bronces, que conjugan lo figurativo con lo abstracto.
La exposición cuenta con la organización del Portal Internacional de Arte HUMA3, que abre al público del 4 al 30 de junio, en concomitancia con la apertura de la Bienal de Artes Visuales de Venecia, en un lugar de privilegio dentro de la ciudad lagunar: el Campo dei Miracoli.
“Mi intención es responder a la placentera sensación que surge de una forma y toma color entre mis manos”, señala María Boneo a propósito de sus delicada piezas, resultado de un proceso de búsqueda que la ha conducido hacia a un momento creativo ideal.