Dentro de esta lógica se gestó una intersección promisoria entre arte, ciencia y tecnología que fue configurando, paulatinamente, un espacio de inquietante productividad. A pesar de ello, en ocasiones, este encuentro puede ser portador de lo que Philippe Dubois denomina el “efecto de profecía (siempre se trata de enunciar una visión del porvenir: a partir de ese momento nada será exactamente como antes, todo habrá de cambiar con el advenimiento de un mundo diferente que no hay que perderse, etc.-que tiene, en última instancia una función potencial de tipo económico)”.
Interactividad, tiempo real, robótica, digitalidad, son algunos términos que asumen este cruce, caracterizando algunas de las posibilidades discursivas de los nuevos medios.
El campo de las artes locales no ha quedado afuera de este proceso. En estos días es posible ver la quinta edición del Premio “Artes y nuevas tecnologías” otorgado conjuntamente por el MAMbA y Fundación Telefónica, instituciones-faro en relación con la temática.
Robots que arman y desarman formas realizadas con desechos conforman la instalación interactiva “Sobre la falta”, del Grupo Proyecto Biopus (Gran Premio a las Nuevas Tecnologías). También con formato instalación, Jorge Castro e Iván Marino obtienen el Primer Premio en la Categoríam “Limbo-Proyecto Multidisciplinario Experimental”, en tanto que Cecilia Castro y Nicolás Bacal obtienen la mención de Honor del Jurado por la sugestiva “Solo soy una cascada (canción de amor)”.
Con una impronta duchampiana, la instalación interactiva de Alejandro Schianchi, nos conduce a reflexionar sobre la dimensión de la técnica en la vida de los sujetos, pero también acerca una mirada crítica en torno a ciertas modas estéticas circulantes. Por otra parte, “Dispersiones”, de Leandro Núñez, se propone como un espacialización sonora cargada de un alto sentido formal en su conformación visual.
En la categoría “Arte digital y Multimedia Experimental”, se destacan las obras de Julia Masvernat, “Luciérnaga Sonora 2.0”, en donde la abstracción y la sonoridad obligan a un sentido lúdico por parte del espectador, de la misma manera que la producción de César Cuevas “Hormigas, la cosa, ojo infinito, nocturno”, tanto que “Proyecto Multiplayer” de Estanislao Florido, ironiza a partir de la apropiación de la estética del video game.
El extrañamiento y el paso del tiempo configuran la precisa conceptualidad de “Gong” (Primer Premio Video experimental Monocanal), de María Antolini. En este segmento también es posible ver las producciones de Enzo Emanuel Giménez, Gustavo Caprín, Adriel Ramos y Nicolás Testoni, entre otros.
En cierta medida, el recorrido por la muestra “Arte y nuevas tecnologías” Premio MAMbA / Fundación Telefónica, nos instala frente a un estado de situación en donde arte, ciencia y tecnología logran una fructífera intersección.

Nota realizada en colaboración con la Licenciatura en Artes Electrónicas de la Universidad Nacional de Tres de Febrero (UNTREF)

Info: Hasta el 16 de mayo
Espacio Fundación Telefónica, Arenales 1540.