Con 190.000 visitantes, la misma cantidad que el año pasado en medio de un clima distendido, con un aumento del 15% en las ventas y un 20% en la cantidad de público especializado que visitó la feria, cerró la 26va edición de Arco. Los números son elocuentes: las compras institucionales alcanzaron los 3.900.000 euros; solamente el Reina Sofí­a compró obra por algo más de 2.000.000, incorporando a su colección Rebecca Horn, Chuck Close, Tunga, y los latinoamericanos Lygia Clark y Richard Serra. La Gobernación de Cantabria adquirió una magní­fica obra de Vik Muñiz y Fundación Coca Cola eligió para su colección una de las minuciosas obras de papel de Máximo González, argentino radicado en México.

MADRID. Con la clara consigna de vender y convertir la Feria en uno de los grandes referentes mundiales por su excelencia, Lourdes Fernández, la nueva directora de ARCO, reforzó su dedicación a los coleccionistas privados, corporaciones e instituciones -con dos jornadas y media exclusivas para profesionales y la inauguración de una sala VIP sponsoreada por la automotriz Hyundai- y un especial esfuerzo en focalizarse en la calidad de la galerí­as seleccionadas, incorporando 46 galerí­as de peso en la escena internacional.
El resultado fue claramente positivo: un muy buen equilibrio entre los distintos lenguajes representados: pintura, escultura, fotografí­a e instalaciones y sobre todo ¡CALIDAD!
Corea, como paí­s invitado, sorprendió a todos por los llamativos trabajos y la diversidad de lenguajes. Jung-Wha Kim, la curadora, se mostró muy entusiasmada por el interés que despertó la obra de muchos de los artistas del paí­s invitado entre el público español: varias de las 14 galerí­as participantes, vendieron toda la obra y al menos 4 de los 38 artistas exhibidos fueron invitados por instituciones a Europa para realizar futuras muestras.
Uno de los grandes atractivos de la feria es, tradicionalmente, el arte Latinoamericano. Con trece galerí­as participantes, Brasil se anticipó a la próxima edición, en la que será el paí­s invitado, con excelentes propuestas, entre las que se destacaron una video instalación de una riña de gallos de Eder Santos presentado por la Galerí­a Brito Cimino; el cautivante proyecto -fotografí­as y video- de Arthur Omar sobre las Madonas del mundo en la Galerí­a paolista Nara Roesler; unos maravillosos trabajos de grafito sobre pvc expandido de Marcelo Moscheta, en la Galerí­a Contemporánea Léo Bahia y las sutiles lí­neas de Fernanda Chieco en Galerí­a Leme.
Las dos galerí­as participantes de Argentina convocaron a muchos coleccionistas con sus atractivas propuestas. Benzacar, un clásico de ARCO, con obra imponente de Liliana Porter, un singular banco de Pablo Reinoso, un mural de Pablo Siquier, exquisita obra de Jorge Macchi y las caracterí­sticas fotografí­as de Flavia Da Rin. Daniel Abate, presente por primera vez en la feria madrileña, exhibió pinturas de Sebastián de Ganay y una novedosa instalación: un cubo de vidrio que refleja en cada uno de sus lados retratos en movimiento de los distintos miembros de una familia. Esta última creación del artista resultó absolutamente fascinante y una verdadera "perlita".
Entre otras propuestas Latinoamericanas se destacaron Sur de Uruguay con dos maravillosos Torres Garcí­a valuados entre 600.000 y 900.000 euros y las atractivas esculturas de Pablo Atchugarry que despertaron especial interés entre los coleccionistas españoles; Lucí­a de la Puente de Perú con obra impregnada de humor del artista Fernando Gutiérrez y las fotografí­as intervenidas de Santiago Rosse. Los proyectos de la colombiana Catalina Casas con la obra siempre comprometida de Fernanda Cardoso, la mexicana Ramis Barquet con una instalación de Betsabé Romero y DPM de Ecuador con los particulares pinturas-fotogramas de Pablo Cardoso y la obra de Manuela Ribadeneira, artista que investiga las fronteras entre lo real y lo imaginario.
Fundación Telefónica, presentó en la feria los ganadores de su premio "Arte y Vida Artificial". El primer premio resultó otra gran satisfacción: Paula Gaetano, de Argentina, con su obra "Alexitimia".
ARCO ha sido siempre el principal referente para el mercado Latinoamericano y la puerta de acceso al continente europeo y se ha distinguido por su apuesta hacia el arte emergente; sin embargo en los últimos años, este escenario ha cambiado con el surgimiento de dos nuevas y pujantes ferias: Art Basel Miami y Frieze en Londres. Consiente de ello, la nueva directora proyecta, en el 2008, mudar la feria a dos pabellones con mayor capacidad.
Brasil será el paí­s invitado en la edición 2008 y, aunque su presencia no es una novedad en la feria, promete mostrarse como una verdadera "potencia creativa" al exhibir obra de 100 de sus artistas mas significativos en una superficie de 1.000m2. Si bien aún no está confirmado, Argentina podrí­a ser el paí­s invitado en el 2010, año en que celebramos el bicentenario de nuestra independencia y convertirse en una buena oportunidad para insertar en el mercado europeo nombres destacados de la producción artí­stica nacional.
Es reconocida internacionalmente por un perfil innovador que coincide con el de Juana de Aizpuru - su primera directora-, por la reflexión crí­tica de lo que significa el arte contemporáneo que supo imprimirle durante veinte años Rosina Gómez Baeza y, en esta nueva edición liderada por Lourdes Fernández, confirma también su rol comercial. La próxima edición que se desarrollará en dos pabellones con mayor capacidad despierta ya nuevas expectativas, "No estamos pensando en crecer en número de participantes" adelantó su actual directora, "pero sí­ en re-estructurar las secciones para atraer a las principales galerí­as del mundo y, con ello, a más coleccionistas".

Orly Benzacar
"Encontré a la feria ARCO mucho mas prolija, esto quiere decir con mejor calidad en general. Lo que también redundó en una mayor homogeneidad de la obra exhibida y eso no me parece muy bueno. Debo decir que Corea como paí­s invitado y algunas propuestas de galerí­as, como la mí­a entre otras, tení­an un aire diferente, una frescura que rompí­a con tanta monotoní­a estética.
Si bien ARCO es una feria bastante localista, en esta edición a las galerí­as extranjeras nos fue bastante bien. La obra de Flavia Da Rin tuvo excelente recepción como artista emergente, lo mismo que la obra de Pablo Reinoso y de Jorge Macchi entre otros. Y, como es habitual, ¡en Madrid siempre se la pasa muy bien!"

Daniel Abate
Participar en una feria como Arco Madrid es una excelente experiencia para una galerí­a argentina. Recibir la invitación de un curador como Moacir Dos Anjos para tener allí­ un proyect-room fue un gran honor para mi. Dadas las condiciones actuales, para una galerí­a argentina participar en ferias del exterior, sobre todo europeas, implica muchí­simo dinero, sobre todo si le intención es promocionar artistas jóvenes, cuyos valores de mercado son muy bajos y es imposible recuperar la inversión. No contamos con polí­ticas culturales que respalden el trabajo de galerí­as profesionales. Brasil, por el contrario, trabaja en dar visibilidad a sus artistas y es así­ como el enví­o y el costo del stand es í­ntegramente pagado por la cancillerí­a brasilera, como sucede en arteBA.