Bajo la curadurí­a general de Victoria Noorthoorn, inauguró el pasado 13 de julio la 29ª Bienal de Arte de Pontevedra; un diálogo entre artistas de Argentina, Chile, Galicia y Uruguay invitados a crear obras especí­ficas que reflexionan sobre la emigración desde múltiples puntos de vista.

La bienal, que se extiende hasta el 3 de septiembre próximo en esta ciudad de Galicia, incluye artistas que trabajan en una diversidad de técnicas y abarcan un amplio espectro generacional, en su gran mayorí­a ajenos al sistema internacional del arte, con el fin de acercar al público una representación diferente del arte contemporáneo de los paí­ses participantes.
Según Victoria Noorthoorn, esta exposición plantea a la imaginación como la fuerza principal que permite al migrante y al artista proyectarse en un futuro y traspasar los lí­mites de sus fronteras, tanto fí­sicas como imaginarias. Al cruzarlas, saltan hacia un nuevo terreno de exploración, muchas veces imaginado pero nunca vivido. El artista, un analista simbólico, toma el lí­mite como sitio de debate y extiende sus propias fronteras de investigación y de práctica artí­stica. Este viaje imaginario implica la afirmación de la libertad del pensamiento y de la acción, una libertad que cuestiona todo estereotipo-y su capacidad de homogeneizar naciones, paí­ses o localidades. Propone, en su lugar, la exploración sobre los mecanismos de la diversidad. Esta exposición ahonda en cómo se constituye el sentimiento de pertenencia, raí­z o localidad, explorando estas preguntas desde un punto de vista amplio, de re-construcción del concepto de identificación, en contraposición a una idea más estática de identidad.
"Las obras creadas para esta Bienal privilegian el riesgo, la experimentación, el pensamiento crí­tico, la resonancia y el eco, en lugar del amparo de la coherencia narrativa o de la nacionalidad. Cada una articula una nueva mirada sobre el mundo y establece la posibilidad de un nuevo mundo, paralelo e imaginariamente posible".
Marina de Caro, una de las artistas participantes, tuvo la sensación que "la presencia argentina en la Bienal aportó propuestas conceptualmente sólidas y que están planteadas con mucha libertad e imaginación. Por otro lado debo comentar que la Bienal estuvo impecable en cuanto a su montaje y presentación de todos los trabajos. Es de un altí­simo nivel profesional y eso se debe a la Curadora..."
Para Roberto Jacoby, otro de nuestros representantes en la bienal aunque la mayorí­a de las obras mostradas son de gran interés y algunas realmente extraordinarias escapan, a los patrones globales del gusto, quizás lo más importante ha sido su función de contacto. "Conocer a los artistas y sus obras de chilenos, uruguayos, gallegos e incluso argentinos de diversas generaciones ha sido sin duda la experiencia más fuerte y paradojal de esta bienal. ¿No es curioso que uno conozca tan poco acerca de lo que tiene más cerca? Es muy notable que la propuesta de trabajo sobre la migraciones y la imaginación demuestre que las fronteras están en muchas partes, frecuentemente mucho más próximas que lo que creemos. El segundo punto, refiere a las desdichas de la recepción. Si los artistas argentinos sufren (o creen sufrir) de cierta marginalidad respecto de los circuitos internacionales contemporáneos la situación de los demás paí­ses se muestra mucho más grave. Los uruguayos (con excepción de Luis Camnitzer, figura internacional residente en Estados Unidos de América) de modo muy injusto han estado por completo ausentes del comentario de la prensa española. Aunque en menor medida, similar silencio se tendió sobre los chilenos. Espero que las visitas de expertos a la Bienal durante los próximos meses reparen estas omisiones. Por último, me gustarí­a destacar la presencia personal de coleccionistas e impulsores culturales como Mauro Herlitzka, Graziella Crivelli e Ignacio Smith que fueron una simpática "hinchada" del team argentino".

Eduardo Basualdo
El Camino del Zorro, 2006
Instalación-performance con muñecos zoomorfos, árboles bonsái, rejas, jaulas y faroles montados sobre heno y proyección de sombras para seis espectadores.
Medidas variables

Marina De Caro
Entreparéntesis, 2006 detalle)
Piso, figuras y colchones tejidos en hilado de acrí­lico y bordados a mano
8 x 8 metros
La realización de esta obra ha sido posible gracias al apoyo de la American Center Foundation.

Esteban Pastorino
Mind Your Step, 2006 detalle)
Proyección de video 3D
La realización de esta obra ha sido posible gracias al apoyo de la American Center Foundation.

Luis Camnitzer
Sin tí­tulo, 2006
Instalación con raí­z, 7000 lápices y carbonilla.