Una galería con compromiso artístico
Han transcurrido quince años desde la apertura de la galería Vía Margutta en la ciudad de Córdoba y con ello, un sinnúmero de acontecimientos sociales, políticos y culturales a nivel provincial y nacional. Nada de esto doblegó el espíritu de lucha, la pasión y la convicción con el que María del Carmen "Maru" Becerra llevó adelante los destinos de este espacio.
Córdoba es un lugar complejo que requiere para aquellos que comercializan en las artes visuales (galerías de arte, dealers) una "cintura" especial.
Lograr el equilibrio que permita gestionar en el interior del país y en la Capital Federal una proyección internacional ha sido el elemento determinante que permitió a Vía Margutta sobrevivir a las diferentes crisis, a la indiferencia del mercado local y a las constantes transformaciones que continuamente experimentan las artes plásticas.
Ha habido muchos proyectos e iniciativas en Córdoba, pero no pocos han quedado en el camino como las galerías, Giácomo Lo Bue, Granillo, Martorelli-Gasser, entre otras. Hubo propuestas de alto nivel con exposiciones de artistas de Córdoba y Buenos Aires, pero el poco interés del público cordobés en adquirir obras de arte contemporáneo obligó a cerrar las puertas. Es obvio decir, sin caer en discursos fatalistas, que la ausencia de políticas culturales contribuyen a la existencia de mercados paupérrimos y el adentrarse en de este contexto resulta poco placentero. Lo que si resulta placentero es la exposición que se realizó entre pinturas y esculturas para conmemorar los quince años de existencia de esta galería, en la que se convocó a artistas de Buenos Aires y Córdoba que representan a la generación del ochenta, como Lecuona J., Monzo O., Medici H., Médici E., Dompé H., Lescano S. y Díaz R. Esta muestra compuesta por mas 30 obras, permite apreciar a grandes rasgos la evolución que a lo largo de veinticinco años de labor en las artes visuales vienen desarrollando estos artistas. Hacer este tipo de muestras es asumir un riesgo y tomar un compromiso con el arte contemporáneo, en el que ese riesgo está directamente vinculado con el público en general, pues es una sociedad conservadora estos lenguajes visuales son difíciles de digerir. Es por ello que el compromiso real está vinculado al perfil estético que caracteriza, por ejemplo, a la galería. La muestra permanecerá abierta hasta el 30 de octubre. Mario Grinberg y la provocación En el Museo Genaro Pérez se realizó una muestra del artista Mario Grinberg compuesta por mas de 30 obras entre pintura, fotografía, video e instalaciones. La exposición, mantiene la mirada crítica y un lenguaje sin concesiones que se refleja en una transformación importante en el manejo del color e imagen que permiten observar a un artista que está en una constante búsqueda. Grinberg se define como un "ser que está en la provocación", y demuestra tener una capacidad para el manejo de los diferentes lenguajes visuales que expone, pero, pese a que no se encuadra en ningún movimiento, su pintura carga el espíritu del expresionismo abstracto.
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