Nota publicada online
Luciana Lamothe, inaugura la temporada en la Galería Ruth Benzacar con una muestra de “alto riesgo”. Es la primera de cinco mujeres con discursos fuertes: Mariana Tejerías, Marie Orensanz, Florencia Rodríguez Giles y Ana Gallardo, que completarán la programación de este año.
¿Hasta que punto se puede cambiar la naturaleza de un material? ¿Se puede partir de un material rígido y volverlo blando? la respuesta no es fácil, sobre todo si estamos hablando de hierro y mas precisamente de tubos de hierro. El nuevo desafío de Luciana Lamothe (Mercedes, Pcia. de Buenos Aires, 1975) consistió en tomar este material industrial y mostrar su costado orgánico. Cambiarle su propia esencia.
Para ello Luciana trabajó de distintas maneras, ocho horas por día durante ocho meses, siempre con la moladora en mano, cortando el caño de manera regular y abriendo o bien, arbitrariamente, para luego quemarlo con un soplete. Su consigna fue abrir, desgarrar y moldear el hierro de distintas maneras para lograr formas y texturas increíbles.
“Todos lo materiales pueden ser blandos, todo depende como los trabajes”, confiesa. Mientras ensayaba tuvo muy presente a la escultora estadounidense Eva Hesse, nacida en Alemania, conocida por su trabajo pionero en materiales como el látex, la fibra de vidrio y el plástico y cuya obra se incluye dentro del postminimalismo y el arte póvera. “Ella también trabajó sobre la ambigüedad del material”.
Estas ocho obras son, tal como se titula la muestra, ocho “ensayos de abertura” que producen en el espacio de la galería un fuerte impacto.
Una muestra de “alto riesgo” que vale la pena visitar.