Nota publicada online


Patricia Rizzo propone una exhibición que desafía al olvido y evidencia la mirada inquisidora de Gallardo que supo acceder a "la intimidad de las cosas".
La galería ODA junto a Mauricio Wainrot presentan "El hilo invisible" una muestra de corte antológico centrada en las pinturas del artista sin dejar de lado un panorama de las diferentes formas que tomó su obra a lo largo de su trayectoria. La selección de las piezas y el diseño expositivo buscan resaltar la singularidad y permiten una experiencia profunda.
Hay ciertas características que se repiten a lo largo de sus pinturas. El uso de una perspectiva no tradicional crea una espacialidad indefinida, pinta arquitecturas complejas, con múltiples planos y profundidades.
Aparecen patrones en el aparente desorden, como señala el texto "comprobando la coherencia en el caos". Su obra fusiona lo concreto de su trabajo con las escenografías, viajes y su condición de inmigrante, con lo intangible de los silencios, creando un "rompecabezas que no encaja" pero evoca resonancias universales.
Con el transcurso de los años fue desapareciendo la figura humana, pero cierta atmósfera onírica y envolvente hace nuestra existencia muy presente. Tras bambalinas, entre sillas, mapas, escaleras, diagonales, grafismos y rayas conforma un sustrato narrativo que le permite abordar cuestiones filosóficas: "La memoria, la fugacidad y la permanencia, el tiempo y sus derivaciones temáticas fueron núcleos de una larga trama que condensa las ideas que ha ido repitiendo y que se reflejaron en un cuerpo de obra extenso".
Sorpresa y admiración fue lo que se vivió el día de la inauguración, ya que el ojo curatorial de Patricia Rizzo trajo luz sobre una producción poco conocida de un reconocido artista y lo reivindica como un gran maestro de la pintura "Su trabajo alcanzó reconocimiento internacional y localmente obtuvo un lugar de prestigio y respeto que se conserva en el recuerdo cariñoso de sus pares". Y para todos aquellos que se quedaron con ganas de ver mas, imperdible visitar el taller (mediante cita previa) y transitar el lado B de "El hilo de las cosas".
Una experiencia fascinante es ingresar al estudio y ver las obras in situ, además de conversar con Mauricio Wainrot, quien comparte anécdotas tras cada paso sobre las obras y los procesos creativos de Gallardo. “Quizá se pasaba tres meses pensando y bocetando, hasta que decantaba la idea y se encerraba a trabajar 30 horas seguidas en una nueva serie. En cada país donde vivimos, tuvo su taller y nunca dejó de producir su obra”.
En el espacio se pueden observar algunas de sus obras más famosas, como El Chupasangre, la serie de camas o sus agendas revestidas en plomo, que aparecen congeladas en el tiempo. Las obras conservan un halo de misterio; son un juego visual que invita a acercarse, pero no resulta tan obvio. Es inútil intentar tocarlas; es mucho mejor dejar volar la imaginación.
ODA arte
"El hilo de las cosas" del artista Carlos Gallardo
Bajo curaduría de Patricia Rizzo
Su puede visitar hasta el día Martes 22.04
De lunes a jueves de 15 a 19
PARANÁ 759 PISO 1, CABA