Nota publicada online
En este segundo video del ciclo de la Fundación ICBC, "El poder de nuestra creatividad". En esta oportunidad presenta la historia y la obra de Teresa Durmüller, quien se destaca por su manejo de múltiples técnicas a través de las cuales reinterpreta temas claves como la naturaleza, la mujer, los animales, y sobre todo los pájaros.
Otros antepasados podrían haber sido los míos,
y yo hubiera abandonado otro nido"
Una del montón, Wislawa Szymborska
Teresa Durmüller nos presenta un muestrario de imágenes (esas flores, pájaros, insectos, caras casualmente atentas, etc.) sin argumentos restrictivos, sin definiciones absolutas. Nada es autoritario en esta exposición de cosas vistas. En cambio, todo es abierto, posible.
Ese quizás sea el secreto de la magia de Durmüller, haber retratado el paso del tiempo sin detenerlo, sin fijarlo académicamente, como si nuestra mirada estuviese incansablemente acompañando a estas figuras femeninas, a esta naturaleza ejemplar, sin exigir que se muestre precisamente allí donde estamos. La generosidad de su pintura nos libera de la tiranía de nuestro propio tiempo y nuestro espacio y nos permite estar presentes en otro tiempo y espacio, el de los modelos.
Esta es, sin duda, la marca de talento de un gran artista, no imponer sus límites ni proponer los del espectador, sino solo los de la pintura misma que fluye así entre los elásticos marcos del cuadro, entre los delicados tonos de color indefinible, entre las formas que parecen tratar infructuosamente de delimitarlos, como el maravilloso rosado que ilumina y vuelve difuso al pájaro de tonos azulados, o el gris plateado que transforma el rojo de las flores de mitraria en algo que se cierra o está a punto de abrirse. Entre esos dos momentos, entre esas dos constantes posibilidades, la pintura de Durmüller cobra su extraordinaria vida.
Alberto Manguel
Este video fue producido por la Fundación ICBC, bajo la dirección de Agustina Punte, responsable del área de Cultura de FICBC