Nota publicada online
Del 16 de abril al 21 de junio de 2015 el Museo Nacional de Artes Visuales de Montevideo (MNAV) presenta Liliana Porter: selección de obra temprana y una reflexión desde el presente, una exposición que reúne una importante selección de obras de la reconocida artista argentina.
La muestra está compuesta por obras provenientes de la Colección Daros Latinamerica de Zúrich, realizadas durante el período 1968-1975, más cinco instalaciones del mismo período reconstruidas para esta exposición: Rope, Nails, Wrinkle, Círculo y Shadows. También se presentan fotografías y dibujos actuales que dialogan con las instalaciones recreadas especialmente para este proyecto.
Adriana Gallo, curadora de la exposición, explica la importancia de esa “obra temprana” en relación a la peripecia vital de la artista: “en 1964, la joven Liliana Porter llegaba a Nueva York en escala de un viaje cuyo destino era París. La energía y la vibrante vida cultural de la ciudad la atraparon y el viaje a Francia fue postergado. Se estableció en Estados Unidos desde donde, sin haberlo imaginado, se convirtió en precursora del arte conceptual latinoamericano. La exposición Liliana Porter: selección de obra temprana y una reflexión desde el presente reúne obras realizadas en ese momento particular de maduración personal y creativa que representa un estadio germinal de su posterior producción artística. Desde sus trabajos actuales, realizados para este proyecto, reflexiona sobre esta etapa temprana de su vida artística y sobre la línea filosófica, ética y estética que ha transitado su obra durante los posteriores cuarenta años”.
“Esta tercera exposición individual de Liliana Porter en Montevideo comprende una reveladora selección de obras que nos permitirán sumergirnos en el pasado y el presente del fascinante mundo de esta gran artista”, agrega Gallo.“En la segunda mitad de la década del 60 —continúa diciendo la curadora—,Porter se volcó a una intensa reflexión sobre su obra que comenzó con el cuestionamiento de su rol como grabadora durante los inicios del New York Graphic Workshop (NYGW) y desembocó hacia fines de los 60 en una revolución personal en relación con su propio trabajo y los temas conceptuales que lo motivaban, una meditación profunda que se tradujo en un período de investigación donde se planteará los temas fundamentales que ha desarrollado en su obra posterior, donde cuestiona los límites entre representación y realidad, las convenciones del lenguaje y las dislocaciones tiempo-espacio. A diferencia de Magritte, a quien Porter reconoce como un referente fundamental en esta reflexión, ella no arriba a la conclusión surrealista de que la realidad se expresa en el inconsciente. Fiel a su tradición latinoamericana y borgiana, Porter entiende que la única respuesta posible a estas cuestiones es que la realidad es parte de una ficción.” |
Recorrido por la exposición
La muestra está organizada en dos núcleos: las obras realizadas de 1968 a 1975 y las obras actuales que la artista propuso para dialogar con las de su producción temprana. Al ingresar a la exposición se presenta Rope (1972), instalación realizada sobre una pared con lápiz y cuerda, reconstruida por Porter para esta ocasión y que se exhibe junto al relieve Arruga y sombra derramada (1970).
El recorrido continúa con la instalación Wrinkle (reconstrucción de su obra de 1969), una serie de impresiones offset que se van arrugando donde el espectador, si lo desea, puede arrancar otras hojas, arrugarlas e integrarlas a la obra. A continuación se exhibe la serie de 10 fotograbados Wrinkle, obras con figuras geométricas como Untitled with Pyramid o Untitled with Sphere y Círculo (1972), intervención en la cual una fotografía de una mano es atravesada por una línea que a su vez se prolonga a la pared formando un círculo.
El tema del tiempo es fundamental e impregna la obra de Porter. La serie de fotografías Forty Years (2013) enfrenta su mano actual con la de los años 70 que es recorrida por una línea gestual trazada en lápiz sobre la pared. A través de esta intervención la artista une presente y pasado y expresa a través de su poesía lo más cercano al presente que podemos llegar. Se enfrentan a esta serie tres vitrinas con dibujos de la serie El intento, realizados en acrílico sobre papel de cuaderno y figurín. En ellas un personaje se empeña en trazar los símbolos de la perfección y el infinito.
Siguiendo el recorrido y en sentido horario se encuentra la serie de seis fotograbados The square (1972). También se exponen To be wrinkled and thrown away (facsimilar de la realizada en 1969). Se trata de libretas de hojas blancas colocadas sobre un panel de madera para que el público pueda arrancar y tirar. Se presentan además dos reconstrucciones realizadas para esta exposición: Shadows (1969) pintura acrílica sobre pared y Nails (1972) junto al grabado en aguatinta Black wrinkle y cuatro grabados y serigrafías: Scratch, Tear, Untitled (shadow), Rope, todas del período 1968-1975. En vitrinas y pedestales se exponen fotografías y material de documentación, dos pequeños objetos geométricos Untitled y dos instalaciones: La Clairvoyance (1999) y El jardinero (2015). La Clairvoyance nos permite seguir la línea de pensamiento que ha transitado Porter durante los últimos cincuenta años.
Esta exposición cuenta con el apoyo de Daros Latinamerica Collection Zürich, Artedu Stiftung y Ad Artis-Asociación de Amigos del MNAV.
Sobre Liliana Porter (Buenos Aires, 1941). Es una de las artistas contemporáneas de mayor influencia en el desarrollo del arte conceptual latinoamericano. Su obra, que abarca grabado, dibujo, pintura, fotografía, video y, recientemente teatro, es un referente en la producción artística internacional. Reside desde 1964 en Nueva York, donde fue cofundadora del New York Graphic Workshop (1964-1970), con Luis Camnitzer y José Guillermo Castillo. Recibió numerosos reconocimientos, entre ellos la beca Guggenheim (1980), el Mid Atlantic/nea Regional Fellowship (1994) y siete premios de investigación otorgados por PSC-CUNY (1994-2004). Fue profesora en Queens College, City University of New York, de 1991 a 2007. Además de integrar la Colección Daros Latinamerica de Zúrich y del Museo Nacional de Artes Visuales de Uruguay, su obra está presente en colecciones públicas y privadas entre las que se destacan: Tate Modern Collection, London; MoMA, New York; Whitney Museum of American Art, New York; Museo Nacional de Bellas Artes, Buenos Aires; Metropolitan Museum of Art, New York; Smithsonian American Art Museum, Washington D.C.; Museo Tamayo, México D.F.; Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía, Madrid; Brooklyn Museum, New York; The Museum of Fine Arts, Houston.