Nota publicada online
Despedimos con cariño y tristeza alartista plástico, inventor, teórico y poeta. Fundador del movimiento Madí y autor de su manifiesto. Hasta sus últimos días en esta tierra, trabajó en nuevos proyectos conquistando el tiempo que le tocó vivir.
Gyula nació en Kosice, un diminuto pueblo de la patria húngara, de donde partió, con apenas tres años, hacia el puerto de Cherbourg en Francia. Allí se enfrentó por primera vez con la inmensidad del mar y la profundidad del firmamento y vio como, en las noches, ambos se fundían en un único escenario sin límites.
Imaginemos a este niño, en esa estación espacial llamada “barco” que, flotando sobre las olas, lo trasladó a lo largo de veintiocho días con sus noches estrelladas, desde Europa hasta América. Seguramente estas primeras luces encendieron su imaginación para explotar después, como el Big Bang, en proyectos de ciudades hidro-espaciales y en obras de arte cinético y lumínico.
La creación, fue, desde el principio el impulso que movió a este polifacético hombre en su lucha por la construcción de una nueva sociedad sin clases, capaz de dominar la energía, el espacio y el tiempo en todos sus sentidos y hasta sus últimas consecuencias.
Cofundador de la revista Arturo, dedicada el arte concreto, y del movimiento de Arte Concreto-Invención. Ya, en 1944, expresaba en las páginas de esta publicación que ”el hombre no ha de terminar en la tierra” y, en el Manifiesto Madí de 1946 afirmó que la arquitectura debería considerar “ambientes y formas desplazables en el espacio”, primer antecedente de sus ciudades hidro-espaciales. El marco irregular, la pintura articulada, la escultura con movimiento articulado y con participación del espectador, son invenciones absolutas de Madí, que se distinguía por revindicar la fantasía y el humor. La primera exposición del Movimiento fue en el instituto Francés de Estudios Superiores de Buenos Aires en 1946. Allí Kosice, presentó sus esculturas hechas con tubos de gas de neón, lo que en París y en Nueva York descubrirían veinte años más tarde. En su continua búsqueda incorporó el agua a sus creaciones. El agua como alma de objetos sorprendentes y el plexiglas como soporte. Luz, agua, movimiento, transparencias: a partir de ese punto el arte de Kosice no admitió límites. Kosice inventó y jugó. Adoptó como padre a Leonardo Da Vinci con su tríada: fusionar el arte, con la ciencia y la tecnología. Kosice fue libre y, a lo largo de su vida, se mantuvo fiel la misma visión:”liberar al hombre de toda atadura”, justamente, la premisa del movimiento Madí.
Recuerdo su respuesta cuando en una entrevista le pregunté qué les diría a los artistas jóvenes y hoy creo que éste es su mejor legado:
Les diría, para empezar, que abandonen la idea de la arquitectura, de los límites. Que conquisten el espacio. Que conquisten su tiempo. La velocidad de la luz sólo puede ser superada por la imaginación que trasciende todos los límites. Si podemos imaginar algo, podremos realizarlo. El sólo imaginarlo ya no tiene límites y yo creo en los des-límites. Le diría a los jóvenes que se vuelvan videntes, que se des-limiten y que inventen nuevos cielos.
Gyula Kosice, finalmente, alcanzó su cielo pero siempre su arte lo mantendrá presente en esta tierra.
Cronología
Nació en Hungría en 1924
Röyi primera escultura articulada y móvil, creada en 1944.
Cofundador de Arte Concreto-Invención, 1945.
Publicación de Invención (esculturas móviles, teoría y poemas), 1945.
Fundador del Movimiento de Arte Madí, 1946.
Autor del Manifiesto Madi, 1946.
Editor de la revista Arte Madí Universal (ocho números)
Creador de estructuras lumínicas, 1946, con gas neón.
Exposición de Arte Madí, representando a la Argentina en el Salón des Réalités Nouvelles, París, 1948.
Creador de la escultura hidráulica, utiliza por primera vez, el agua como elemento esencial de sus obras, 1949.
Exposición Retrospectiva "100 obras de Kosice, un precursor" en el Instituto Di Tella, 1968.
Exposición Retrospectiva en el Museo Nacional de Bellas Artes de Buenos Aires, 1991.
Exposición de obras Digitales en el Centro Cultural Recoleta, 2003.
Exposición en el Centro Georges Pompidou, 2013.
Gyula Kosice ha publicado más de quince libros de ensayo y poesía; realizó alrededor de cuarenta exposiciones individuales y ha participado en más de cuatrocientas exposiciones colectivas nacionales e internacionales. Fue distinguido “Caballero de las Artes y las Letras” por el gobierno de Francia, y nombrado Ciudadano Ilustre de la Ciudad de Buenos Aires. Es autor de esculturas monumentales expuestas en lugares públicos en América Latina, Europa y Asia.