Nace en Buenos Aires en el año 1924 y falleció en París el 31 de diciembre de 1995 mientras se desempeñaba como Embajador de la Argentina ante la UNESCO. Tres etapas caracterizan su obra: primero, la figuración luego, la abstracción lírica y finalmente la geometría sensible. En esta última, la belleza del color y la sensibilidad de la línea adquieren particular relevancia. Torres Agüero vivió en Japón desde 1959 hasta 1961, permanencia que lo orientó definitivamente hacia la abstracción. Su obra de la etapa que denominamos geométrica solo a manera de indicio, es un proceso continuo de estímulo y hallazgo del satori, esa iluminación repentina que conduce a la verdad, según el zen.