Nace el 11 de Junio de 1929 en un pueblo del sur de Italia llamado Polia. Sus padres son: Vittorio Pujia y Maria Vallone. Ya en su infancia denota su interés por las formas modelando sus propios juguetes con arcilla que obtenía de las orillas de un arroyo.
En 1937 emigra con su madre y su hermana mayor hacia la Argentina donde los esperaba Vittorio que había viajado cuando Antonio tenia dos años. Llega a Buenos Aires y comienza sus estudios primarios con cierta dificultad puesto padecía de miopía.
Muy chico y, con la complicidad de su madre, consigue anotarse en el examen de ingreso de la Escuela Manuel Belgrano. obtiene el titulo de Profesor Nacional de Dibujo en la Escuela Nacional de Bellas Artes Prilidiano Pueyrredón y el de Profesor de Escultura en la Escuela Superior de Bellas Artes Ernesto de la Carcova. Este periodo de estudios abarca desde 1943 hasta 1954 y tiene como profesores a artistas de la talla de Troiano Troiani, Alfredo Bigatti, Alberto Lagos y José Fioravanti, con los cuales también trabaja como ayudante en sus talleres, también trabaja como ayudante en el taller de Rogelio Yrurtia.
En 1956, el entonces Director Técnico del Teatro Colón, Hector Basaldua, decide dotar al Teatro de un taller de escultura escenográfica para lo cual organiza un concurso, el cual es ganado por Antonio Pujia; quien se desempeña como jefe del mismo hasta 1970. De este periodo proviene su fascinación por la música y la danza. En 1966 realiza el retrato de Norma Fontela que hoy se exhibe en el foyer del teatro.
En 1959 Gana su primer premio de importancia: el Gran Premio del Salón Municipal Manuel Belgrano. Esta distinción lo empuja a profundizar su compromiso con el arte. Esto iniciaría una seguidilla de premios crecientes en importancia y ganados a una edad poco usual, puesto que los mismos se daban, por lo general a artistas de mayor edad y trayectoria. En 1960 gana el Gran Premio de honor del Salón Nacional de Artes Plásticas a la edad de 30 años.
En 1965, motivado por esta secuencia de premios, decide realizar su primer muestra individual en la histórica galería Witcomb y se embarca en una producción ininterrumpida que continúa hasta hoy.