Creador multifacético, León Ferrari (1920-2013) fue uno de los artistas argentinos más originales y relevantes de la historia reciente. Autodidacta, comenzó a trabajar en los años 50 con cerámica y tallas en madera, para incorporar luego diversos materiales y soportes. Posteriormente, dio inicio a las llamadas escrituras abstractas, obras que siguió realizando a lo largo de toda su carrera.
En 1965, produjo una de sus piezas más controvertidas: “La civilización occidental y cristiana”, una imagen de Cristo crucificado sobre un bombardero estadounidense, una potente denuncia de la relación existente entre religión, política y violencia en la cultura occidental. A mediados de los años 70, Ferrari dejó la Argentina a causa de la dictadura militar y se radicó en San Pablo, Brasil, donde continuó sus experimentaciones vanguardistas en el campo de las artes visuales. Con el retorno de la democracia, en la década del 80, volvió a la Argentina y se instaló definitivamente en Buenos Aires. Llevó a cabo exposiciones individuales y colectivas en los más importantes centros y eventos artísticos del mundo, como documenta de Kassel, Haus der Kulturen der Welt, (Berlín), Museo Ludwig (Colonia), Alemania; Pinacoteca do Estado, Bienal de San Pablo, Brasil; Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía, Madrid, España; Museo de Arte Moderno de Buenos Aires, Argentina; Smithsonian Institution, Washington D.C, Estados Unidos; Bienal de La Habana, Cuba, y Museo de Arte Carrillo Gil, México D.F, entre muchos otros.
En 2007, recibió el León de Oro al mejor artista en la 52° Exposición Internacional de Arte Bienal de Venecia, Italia. En 2009, realizó una exposición en el Museo de Arte Moderno (MoMA) de Nueva York y, en 2010, fue invitado de honor en Les Rencontres d’Arles, Francia, ocasión en la que presentó una gran retrospectiva de su obra.