Los mitos ancestrales e innumerables restos arqueológicos dan cuenta de una dimensión cósmica, ctónica y celeste de las formas de lo femenino. Sin embargo, con el devenir del tiempo y particularmente en la actualidad y a nivel masivo, las mujeres hemos sido formateadas durante décadas por clichés referidos a nuestro cuerpo – en función de lo meramente maternal o de lo estético- sin ahondar en las capacidades espirituales o psicológicas que las antiguas tradiciones sí ofrecían. Un ejemplo es lo que sucedía en la Grecia arcaica, donde era notoria la predilección por lo femenino y hasta en las tragedias se ensalzaba a la mujer como heroína.  Es notable cómo ese rol se fue diluyendo con el tiempo para ser recuperado fragmentariamente a lo largo de los siglos hasta llegar al tiempo presente.

Con curaduría de Sylvie Nante, esta muestra intenta recuperar formas arquetípicas femeninas en base a lo que han imaginado tres artistas.

Susana de Muro presenta, mediante la geometría y la perspectiva jerárquica, mujeres que   simbolizan distintos rostros de lo universal. En una están todas, se podría decir. En sus óleos y tintas se entrecruzan diagonales y oblicuas con estructura rítmica para dar forma a siluetas que se replican a la manera de los vitrales  y que como ellos funcionan como una epifanía del misterio. En otro registro, los coloridos collares, perfumeros y floreros por un lado evocan las vasijas de las arcaicas diosas madres y por el otro la delicadeza de sus manos.

Algo distinto sucede con las obras de Cristina Ferreras: son semblantes de carne y hueso que surgen de cuerpos esbozados, a veces ausentes, como implicando el rechazo a todo criterio universal de belleza. Ferreras trabaja con óleos, acrílicos, tintas y papeles intervenidos y atados que al desplegarse suscitan una emoción poderosa y desgarradora. La disolución de la carne, la corrosión de la materia. Fragmentación del cuerpo que eleva el alma hacia lo sutil y lo insondable…

Se podría decir que al contemplar las pinturas de Betina Pietro resulta inevitable identificarse con algunos de los personajes y objetos que nos brinda: nos retrotraen a rincones de nuestra infancia o bien nos generan una tensión que suscita el diálogo entre lo  poético y lo virtual . Desde su mundo interior, mujeres y niñas son retratadas por momentos en un entorno cuasi metafísico; en otros, la artista construye el espacio plástico con fondos matelaseados, esterillados o con una pluralidad de botones que pasan a ser tan protagonistas como la persona retratada.      

Tres artistas mujeres que ponen el foco en distintos aspectos de lo femenino y su entorno.  Sus obras emanan una dinámica intensidad proveniente de un trabajo constante y una indagación existencial.

Curaduría de Sylvie Nante.

La muestra se podrá visitar desde el jueves 18 de abril a las 19hs hasta el 31 de mayo en Fundación Vocación Humana, Araoz 1942, Palermo.

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