Nota publicada online
Las fotógrafas argentinas Carola Rousso, Brenda Hoffman y Silvia Sergi, expondrán del 4 de julio al 4 de agosto, en el Palmengarten, Jardín Botánico de la ciudad de Frankfurt. La muestra cuenta con la curaduría de Diana Saiegh y Gabriela Jurevicius, invita a vivir la naturaleza, tema central de "Jangada".
Una Jangada es una embarcación o balsa precaria que solía navegar a menudo por la zona del litoral argentino, armada con troncos que utilizaban los jangaderos para acarrear madera hacia el puerto... río abajo. Es esta figura centenaria la que inspira el nombre del proyecto fotográfico que viaja desde el Delta del Tigre hacia Frankfurt uniendo creatividad y talento artístico con la cultura del lugar.
El litoral es un gran territorio argentino, sinónimo de ABRAZO territorial, se trata de una región abrazada entre caudalosos ríos que bajan hacia el sur y en ese recorrido se abren en ríos y brazos conformando un delta de islas, arroyos y riachos navegables y áreas pobladas por individuos con igual identidad y pertenencia cultural. Esta impronta geográfica se caracteriza por el valor simbólico del nombre de esos afluentes, algunos de ellos con nombres que remiten a la herencia guaraní originaria de aguas arriba... y así se reconocen familiarmente como isleños del Rama Negra, o del Espera, o del Esperita, del Abravieja, del Gambado, del Paraná Mini o el Paraná Guazú, por citar algunos nombres de esos ríos.
Jangada es una embarcación precaria que se veía a menudo como una balsa armada con troncos que utilizaban los jangaderos para acarrear troncos y maderas hacia el puerto...río abajo.
Tres artistas, tres miradas, tres lenguajes: un mismo paisaje: el Delta
En esa evocación se sitúa el trabajo de estas artistas argentinas, que partieron de esas influencias y orígenes para mostrar cada una con su estética sus sueños y miradas del lugar en la actualidad. Ellas conforman un conjunto que puede leerse como "Postales", encontradas en viejos baúles enterrados en esos arroyos o ríos... que al rescatarlas, salen a la superficie en modo fotográfico, obras de asombrosa calidad sumado a la cualidad de su intensa capacidad de transmitirnos con profunda sensibilidad ese entorno salvaje y singular.
Tres lugares desde donde ejercen profesionalmente y donde habitan
Brenda Hoffman vive y trabaja hace años en París, sus recuerdos infantiles y juveniles la trasladan a ese Delta, a ese Tigre que recorría con su abuelo en días de inocencia y felicidad familiar. Y desde esas lejanas geografías se interna en su laboratorio parisino para revelar esos recuerdos hasta que el nitrato del papel duela y cale hondo hasta reservar para mostrar aquellas piezas que a partir de su búsqueda de excelencia y rigor profesional merecen a su criterio ser mostradas.
Carola Rousso llega al Delta como llegamos casi todos, por asombro y fascinación y se deja atrapar por el asombro de una naturaleza agreste y poco urbana, hasta que se topa con la gran obra literaria de Haroldo Conti. "Sudestada", y emprende el recorrido palmo a palmo de los sitios y rincones nombrados por Conti, cuya carrera queda trunca, ya que Conti integra la triste y negra lista de escritores desaparecidos por la dictadura militar. Haroldo solía escribir sumergido en el encanto de su casita del Arroyo Gambado, hoy recuperada como casa museo por el municipio.
Las fotos de Carola trascienden ese registro histórico cultural y se tornan piezas únicas de acabada factura y elocuente sensibilidad cercanas a lo pictórico.
Silvia Sergi es una artista que, subyugada por esa realidad de sauces y cipreses decidió dejar la comodidad de la ciudad para instalarse y vivir con sus cámaras fotográficas, sus hijos y sus perros en el Delta profundo y austero, el Río Capitán es su calle y su casa.
Tres modelos de apropiación de un paisaje argentino, singular y poético
El Delta supo ser el lugar de creación de Xul Solar, de escritores, pintores y poetas , un silencio penetrante solo atravesado por las lanchas colectivas un torrente de aguas que le dan pelea a la costa día a día para que la corriente no se lleve pedazos de tierra, donde el junco es el amigo del hombre para poder pisar tierra casi firme.
Pero ese Delta y esas tierras del Tigre también tienen espacios construidos con lo majestuoso de una época como el Tigre Club, hoy Museo MAT o el Puerto de Frutos o la Casa de la Cultura con arquitectura clásica del lugar de descanso y veraneo que era a principios del siglo XX. Así como el Club de Remo Teutonia de la colectividad alemana.