Nota publicada online
La multipremiada artista argentina vuelve a Córdoba con una exposición de grabados, ensambles y dibujos que se vinculan a una visión filosófica: la naturaleza como reserva de vitalidad y de belleza. La exposición se podrá ver hasta el 3 de septiembre en el Museo Caraffa.
Dejar flores para señalar una tumba de árboles quemados. Inventar un ritual que recuerde las ramitas asesinadas. Caminar en busca de vida por un cementerio de carbón, arena y cenizas. Pintarle un cuadro de puros grises y negros a la naturaleza martirizada. Componer un mantra visual de gasas verdes para revivir lo muerto. Asistir con goteo a la madera calcinada, como si la materia a resucitar fuera una paciente terminal pero con alguna chance. Sólo un loco (o una artista) le cedería una fracción de su tiempo a ese tipo de acciones.
Esos fueron algunos de los ritos que Olga Autunno, en un arranque de furor poético y reparador, emprendió en 2015, casi encima de los incendios que asolaron más de 40 mil hectáreas en el valle del lago Cholila y en el Parque Nacional Los Alerces, en la provincia de Chubut. Todavía se podían ver laderas ardientes. Caminata y gestos de sanación, una pizca deland art, fotografías y una instalación de pinitos bebé dieron forma a “Bosque encendido”, una muestra que la artista argentina propuso en el museo porteño Eduardo Sívori.
Después vino, en La Caja de Cristal del Banco Ciudad, “Acerca de la supervivencia”, una muestra que le metía una inyección de esperanza a la aniquilación de la naturaleza, haciéndole un guiño a su poder de regeneración.
Con ese mundo de preocupaciones y de señalamiento del ecocidio en curso se vincula directamente “Inmanencia vital”, la exposición con la que Olga Autunno regresa a Córdoba.
Si “Bosque encendido” tenía el tono de un réquiem y “Acerca de la supervivencia” buscaba simbolizar una oportunidad de renacimiento, “Inmanencia vital” se nutre con más fuerza de la idea del poder soberano de lo natural.
En la primera parte, que incorpora cuatro obras de la serie precedente (se incluye, por ejemplo, Fuente y follaje, litografía/algrafía que ganó el Primer Premio de Grabado en el Salón Nacional 2016), la exposición se enlaza al dramatismo del que proviene, pero avanza con decisión hacia una visión filosófica según la cual el mundo natural se afirma como reserva de vitalidad y de belleza.
Nacida en Buenos Aires, la consagrada y multipremiada grabadora pasó su infancia y vivió muchos años en Córdoba, una provincia que todos los años arde. Se formó en la Escuela de Artes de la UNC, y expone desde 1985. Su vínculo con Córdoba es intenso y productivo, y está también en el origen de su interés por la naturaleza.
“Digamos que me crie entre el río y la montaña, cuando Carlos Paz era una villa serrana -cuenta la artista-. Así que la naturaleza siempre estuvo internalizada en mí. Eso fue parte de mi vida. Tengo el río a cinco cuadras de mi casa en Carlos Paz. Lo recorría haciendo fotos de todo lo que encontraba, los desperdicios, los plásticos. Con esos registros hice una muestra de fotos, a pesar de que yo provengo del grabado, del dibujo. Después comienza a hacer muestras sobre esos ríos contaminados en museos de otras provincias como Tucumán, Salta y Jujuy”.
Su deseo de sacudir las conciencias no ha mermado. Al contrario. “Inmanencia vital” es un canto a la energía, a las vibraciones que contagian, una especie de reverso del género de la “naturaleza muerta”. Grabados de gran formato (ramas, follajes, mariposas) se traman con algrafías (litografía sobre aluminio), ensambles de metal y madera con motivos naturales que se podrían leer como puertas de entrada a un paraíso todavía posible. También hay lugar para lo sutil: semillas sobre papel (El origen I y II) que refuerzan la idea de la vida que germina.
¿Qué porción (aunque sea minúscula) de vida, de latido, de brote o aleteo, permite lanzar la flecha que alcance los corazones humanos? No del todo desprendida de una matriz romántica, “Inmanencia vital” propone abrirse a la magia, dejarse flechar.
INMANENCIA VITAL
15/06/2023 - 03/09/2023
Museo Emilio Caraffa
Sala I
Av. Poeta Lugones 411
Córdoba, Argentina