Nota publicada online
BIENALSUR, el evento cultural más extenso del mundo, recorre18.370 desde Buenos Aires a Tokio, una geografía que desde julio y hasta diciembre despliega más de 170 de accionesartísticas en 70 ciudades de28 países de los cinco continentes,en torno a problemáticas de medio ambiente, migraciones, perspectivas de género, construcción de relatos, fake news y democracias.
“Medianoche”da título a la muestra del argentino Nicolás Bacalque el16 de noviembre a las18 horas se inaugurará en el Museo Nacional de Arte Decorativo de Argentina, en el KM 3.2 BIENALSUR, co-curada por sus coterráneos Francisco Medail y Diana Wechsler, directora artística de la bienal nacida en Argentina. La exposición permanecerá abierta hasta el 28 de enero.
"Medianoche" reúne dos trabajos sobre el Cielo y la Tierra. “Las fotografías aquí exhibidas reproducen la disposición de las estrellas y nebulosas en la Vía Láctea a partir de objetos cotidianos. Cada una de estas imágenes corresponde a un fragmento del plano galáctico en el que las estrellas que conforman alguna constelación aparecen en foco, mientras el resto de los objetos indefinidos remiten al polvo cósmico. De este modo, lo mundano se transforma en estelar y devela una cosmología del desorden”, explica FranciscoMedailen el texto curatorial.
Por otra parte, indica el curador, “una instalación de 36 banquitos de madera maciza con objetos incrustados trae a escena las constelaciones que forman parte del Hemisferio Norte. Cada banco puede ser utilizado y tiene tallado en su base una constelación. Mientras que la disposición de las patas contribuye al dibujo de éstas, los objetos incrustados funcionan como comentarios sobre mitologías existentes, como líneas de fuga o puntos de partida para nuevas imaginaciones”.
Hacia mediados de siglo XX, comenzaron a editarse en Argentina los primeros manuales sobre fotografía astronómica. Eran publicaciones técnicas dedicadas a un público aficionado que, a través de cámaras sencillas e instrumentos de fácil construcción, podía obtener imágenes de la Vía Láctea. Más allá de su éxito relativo, estos manuales permitieron la unión de dos dimensiones: lo intangible y lejano del espacio exterior con lo ordinario y familiar de los objetos de uso diario. Es en esta unión donde radica el interés de Nicolás Bacal. Su poética gira en torno al cruce entre la inmensidad y la pequeñez, lo terrenal y lo celestino.
Partiendo de la divulgación científica como género literario, Bacal traza operaciones que contraponen la dureza conceptual del tema con la fragilidad plástica de la materia. En su obra confluye el contraste y la metáfora para devenir en experimentos visuales de carácter preciso.
De esta manera, postula Medail,"’Medianoche" se presenta como una parcialidad, ni el plano galáctico está completo ni las 88 constelaciones que conforman la esfera celeste están presentes en esta sala. Y es que desde la experiencia humana no es posible ver la totalidad del cielo. En ese sentido, la muestra funciona como contrapunto: mientras en un hemisferio es de noche, hay otro en el que es de día. Vale la pena preguntarse entonces, desde el sótano de este palacio europeo, cómo hacer para encontrar ese lado restante”.
Esta muestra tuvo su preámbulo en el Museo de Arte Contemporáneo de la provincia de Buenos Aires MAR, Argentina, en KM 383 BIENALSUR, donde esta bienal inauguró su cuarta edición. Bacal formó parte de la muestra colectiva “EXTRA/ordinario”con la instalación“ La velocidad de las cosas”,que refería al capítulo sur de este mismo trabajo.