Nota publicada online
Segunda inciativa de Fundación Proa conjuntamente con la Cátedra Saltzman de Diseño de Indumentaria y Textil (FADU-UBA) que preanuncia el cierre de la exhibición del artista Joseph Beuys en las salas de La Boca este fin de semana.
Se realizó el sábado 31 de mayo, una puesta en escena muy cuidada, llena de vigor y talento, sobre la base de una consigna que se inspiraba en toda la producción del artista alemán. Los tres niveles de la cátedra se orientaron por diferentes vínculos con la iconografía de Beuys: chaleco, sombrero, bastón y botas para el segundo año de la cátedra dedicado al traje masculino; estampas sobre un modelo adherido a las formas delgadas de los cuerpos, funcionando casi como segunda piel, para los alumnos del ciclo inicial. Recordando que la obra de Beuys hace hincapié en la alquimia, las transformaciones y la supervivencia, el uso de algunos materiales incluyó el fieltro y pequeños sets de elementos que, en un bolsillo mochila, garantizan la vida en caso extremo. El maquillaje reforzaba la idea de una belleza singular que trasmitía variables expresivas muy acordes con los prototipos desfilados, incluyendo los rostros dorados a la hoja típico de la performance aquella en la que, en susurros, explicaba arte a una liebre muerta.
Pero los trajes más espectaculares, se centraron en los modelos relacionales diseñados por el tercer año, que fueron desfilados por parejas, pues los diseños permitían abrazos, protecciones y caricias, jugando con la materialidad de algunas telas que sustentaban esa funcionalidad. Los más asombrosos y curiosos ropajes danzantes que cerraron el recorrido, lucidos por bailarines muy bien entrenados, quienes demostraron que esa piel agregada produce una verdadera transformación en la posibilidad de expresión del cuerpo. De la segunda piel a un segundo cuerpo, perdiendo incluso la forma humana, en diseños que parecían suntuosos pero estaban hechos, al igual que la obra referida, con materiales simples, nobles y fácilmente adquiribles.
La música, creada para la ocasión por Felipe Zamorano Graffiggna, una fusión de segmentos de voces, melodías cercanas al tango y mucha potencia, sirvió para acercar la atención a un desfile que además de intenso, estaba pensado en contrario al dispositivo de volver sobre los pasos. Iniciaba en el ventanal del primer piso de Proa, de allí hacia el tramo de la pasarela y luego, cruzando la calle hasta recorrer un tramo de la Vuelta de Rocha. Permitiendo así, no sólo emular el concepto coral de algunas de las obras del alemán sino unir espacio interior con el espacio de la explanada y desde allí al río.
Una fiesta creativa, donde el talento y la buena organización, dejaron una huella impetuosa en el cuerpo de los espectadores conjugando el universo poético de Beuys en más de cien prototipos, abriendo el museo a la calle, todo a beneficio de los chicos de la Isla Maciel.
Organizada por la Galerie Thomas Modern de Munich, en colaboración con el Instituto Plano cultural de San Pablo y Fundación Proa, la exhibición cuenta con el auspicio de Tenaris-Organización Techint.
Joseph Beuys, Obras 1955-1985
Hasta el domingo 15 de junio de 2014
Itinerancia: Museo MAC Niteroi de Rio de Janeiro