Nota publicada online
Hasta el 15 de julio puede visitarse la muestra Caras y contracaras en Galería Isabel Anchorena.
Perla, una gorda desfachatada, el Cocinero, las tres Gracias y las tres Desgracias son algunos de los personajes de José Menendez que hoy pueblan la Galería Isabel Anchorena, desbordando de vida y color.
Una pasión que comenzó como un juego mientras, el artista, estudiaba poco y dibujaba mucho: cawboys, indios y gauchos. Cuando le llegó la hora de dibujar mujeres, todas resultaban toscas y varoniles, decidió estudiar dibujo y modelo vivo con Luis Palombo, pero fue en el taller de Ricardo Garabito donde encontró su camino expresivo.
Múltiples intereses lo llevaron a recorrer tierras lejanas, como Australia y Nueva Zelanda. Buen observador de la naturaleza y de la naturaleza humana, capta su esencia y la plasma con acuarela, óleo o acrílico. Le encanta la magia y la trasparencia, pero también necesita hacer vibrar el color.
José Menendez no pensó que se dedicaría al arte; era su madre la que pintaba y también la que se convirtió en su primera coleccionista. En los últimos años se dedicó full time a pintar porque “le hace bien”. Expone habitualmente en Argentina y Uruguay y en el año 2000 realizó una importante exhibición en el Centro Cultural Recoleta.
Los personajes brotan de su inconsciente con trazo suelto y seguro y, una vez pintados, cobran vida, adoptan un nombre e involucran al espectador siempre con una nota de humor. Menendez es un verdadero cronista de la cotidianeidad y su búsqueda es un goce que trasmite invariablemente en la obra.