Guerrero Art Station es una estación de arte. Ubicado en la calle Honduras, uno puede venir estimulado por una hermosa caminata repleta de bares, arquitectura y plantas y, llegar a GAS, un nuevo espacio que integra taller, biblioteca (con más de 350 libros de arte contemporáneo), patio, showroom, arte, diseño y casa.
Su directora es la artista Mariana Guerrero: Formada en música, diseño y artes plásticas, transformó la casa en donde vivía con su familia en Guerrero Art Station, un lugar de encuentro para producir, pensar, y exhibir arte contemporáneo.

Abrís las puertas de tu casa.
Exacto. Y me gusta pensarlo como una manera de descontracturar el espacio. Que esto pueda ser un lugar acogedor, de encuentro y cruce entre artistas, teóricos, estudiosos del arte y el público también. 

Para GAS tuviste que reconfigurar este espacio…
Sí, arriba está el taller en donde exhibo la primera muestra -Chutohampa-, cuya inauguración también representa la apertura de GAS. Luego está el showroom con obras mías, y, la biblioteca. Con el tiempo se van a ir habilitando más ambientes y esto lo asocio a pensar GAS como una estación, un lugar de paso, de transición, y reunión sin, obviamente, renegar de lo comercial en donde las obras exhibidas también se venden. 

¿Cuál va a ser el programa de exhibiciones?
Se van a realizar cuatro exposiciones por año que comienzan ahora, en otoño, con mi muestra individual. La idea es que de aquí en adelante, las exhibiciones sean colectivas. Estamos pensando en hacer una próxima con obra gráfica, otra con fotografía, y tal vez una más de videoarte.

¿Qué otro tipo de actividades propone GAS?
Es un espacio comunitario en expansión. En este 2013 concluiré la mudanza y quedará un lugar muy grande con ambientes que dan al patio y, la idea es que funcione como una casa para el intercambio entre agentes del mundo del arte. Eventualmente iremos anunciando el programa de actividades: Mesas de trabajo, charlas, seminarios, ciclos de proyecciones y, obviamente también, un lugar de trabajo y reflexión.

¿Cómo surgió este proyecto multifacético de GAS?
Fue una necesidad de abrir mi espacio a la calle. De compartir y nutrirnos del intercambio desde un lugar acogedor y relajado.

Proponés también una estructura interdisciplinaria y, por lo que contás, con una jerarquía bastante horizontal.
Es que quiero que sea un lugar de participación en donde la gente esté cómoda. Además, yo soy artista y me interesa también que el lugar esté propuesto y gestionado desde el artista.

La primera muestra de GAS es Chutohampa. La curadora, María Lightowler, define esta expresión japonesa como "lo que está entre medio, lo que no está completo".
Chutohampa lo tomé de un texto de un artista coreano que se refería al arte crudo, un arte no pulido. Me gustó el concepto y en mi caso lo adopté de dos maneras: Por un lado tiene que ver con hacer una muestra de pintura después de tantos años de tener el grabado como lo principal en mi obra. Ese "in between" es la pintura y una necesidad muy fuerte de volver a ella. Por otro lado, en la muestra presento una serie de pinturas -2009/2013-, en donde está presente esa idea de lo inacabado, el boceto y la línea del lápiz presente.

Hacés una investigación del color, con prueba y selección de paletas antes de empezar a pintar.
Sí, primero elijo los pantones de color que, en esta muestra, se caracterizan por la predominancia de verdes, pasteles y la ausencia total del negro.

Es interesante que la muestra sea en tu taller, con tus elementos de trabajo a la vista, tus ensayos y mesa de trabajo.
Sí, acá hay un poco de todo con lo que trabajé y trabajo… Es un hilo conductor de mi obra y además, tiene que ver nuevamente con esa necesidad de compartir este espacio que es Guerrero Art Station.

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