Antonio Seguí nació en Villa Allende, Córdoba, Argentina en 1934 y estudió arte en Buenos Aires, Europa y México. Sus obras representan escenas detalladas de ciudades. Las distinciones entre lo real y lo fantástico no son muy claras en el arte de Seguí. Algunos de sus emblemáticos hombres con sombrero aparecen más grandes que los edificios; algunos consisten solamente en una cabeza sobre ruedas. El color y la comedia se combinan en una colocación urbana y demuestran que Antonio Seguí fue verdaderamente un hombre de las ciudades.

Desde 1963 residía en Paris pero todos los años visitaba si Córdoba natal. En 1991, un año después de recibir el Gran Premio del Fondo Nacional de las Artes, el Museo organizó una amplia retrospectiva de su producción: “Seguí en el Museo” con piezas realizadas entre 1958 y 1990.

A lo largo de su trayectoria Antonio Seguí realizó más de 200 exposiciones individuales en los cinco continentes, representó al país en la XLI Bienal de Venecia en 1984, ganó casi 40 premios internacionales y sus obras forman parte de al menos 90 colecciones públicas del mundo, como el MOMA de Nueva York o el Pompidou de Francia.

Su última muestra en Argentina fue en la Casa del Bicentenario en 2020, dónde el Museo Nacional del Grabado y el Ministerio de Cultura de la Nación presentaron: Antonio Seguí. Grabados del patrimonio, colecciones y donación, exhibición que reunió más de sesenta obras con foco en el uso particular que el artista hizo de la técnica del grabado a lo largo de su extensa y reconocida trayectoria. El corpus de obras proveniente del patrimonio del Museo Nacional del Grabado, de una colección particular y de la colección del artista que incluyó una serie de 16 carborundums donados por Seguí al museo.