La cooperación a largo plazo que propone el programa Art Basel Cities incluye este encuentro en Buenos Aires donde Ana Castella, directora de la Galeria joségarcía,mx en el DF y Luciana Brito, de la Galería homónina de Sao Pablo, Brasil, presentaron dos workshop para galerías locales especialmente invitadas.

Ana Castella desarrolló “Plataformas de colaboración internacional entre galerías” narrando en profundidad lo que sucedió en abril de 2018. Fue la primera edición de Condo en la Ciudad de México, donde coordinó el alojamiento de 27 galerías internacionales en los espacios de 22 galerías locales.  “Feliz de estar acá” me dice apenas comienza la charla, pues el plan de Ana Castella es difundir y debatir un proyecto singular que comenzó en Londres hace unos años por iniciativa de Vanesa Carlos. “Lleva el nombre de Condo por condominio, es decir un espacio para ser habitado por muchas personas”. Explica con entusiasmo que, si bien en México no hay un gran mercado de arte, hay sí un gran atractivo cultural que puede ofrecerse para reforzar el trabajo de galerías. “Es un proyecto muy nuevo y por lo tanto permeable a adecuaciones”, aclara. Consiste en que “las galerías locales abren un espacio dentro de sus instalaciones por un mes a otras galerías de fuera, muchas de las cuales no son de países centrales o no participan en ferias internacionales”.

Esta condición ofrece ventajas que “implica acercar nuevos modelos para volver a experimentar un poco y volver al origen de lo que hacemos como galeristas”, ya que sin duda la participación en el modelo de ferias involucra “no sólo una erogación económica fuerte sino una gran tensión para producir ventas que hace que mientras dure la misma, los galeristas están condicionados a enfocarse en este plan, casi sin poder hacer otros vínculos”. Como Ana lo define Condo es “crear otro ecosistema, no validando solo la competencia sino favoreciendo todo tipo de intercambios, para mejorar y fortalecer el trabajo de representar artistas”. Funciona adaptándose en cada caso, pero básicamente: “la galería local abre su espacio a otra galería de fuera, sin pagar nada pero tampoco sin cobrar comisión en las posibles ventas, manteniendo sus responsabilidades como artífice local”. Este sistema tiene una apertura que, en el caso de México, fue una fiesta para 200 personas con la típica comida local, y luego se extiende durante un mes. “Este modelo permite conocer artistas que muchas veces no circulan por ferias, vincular galerías de ciudades no centrales y tener presencia en esa otra ciudad muchas veces no da un rédito inmediato, pero abre otras posibilidades”.

La galería que viene de fuera sí debe pagar un pequeño feed de donde salen los honorarios del diseñador, para ofrecer un mapa detallado de las galerías participantes que permite recorrer esa enorme ciudad que es el DF. “La galería invitada puede no viajar, mandar incluso instrucciones para el montaje, de modo que con recursos muy pautados puede ofrecer sus artistas en otra ciudad en un gran evento” que destaca enfáticamente “constituye un momento muy interesante que se hace de una manera muy ligera pero cuyo impacto no es tan liviano”.

Luciana Brito ofreció su “Workshop: Asociaciones institucionales entre galerías y su impacto en el desarrollo de la escena del arte”. Es una mujer muy cálida y dispuesta a conversar. Su galería tiene 21 años de trayectoria, pero ella es presidenta desde hace dos y medio de ABACT, la Asociación Brasileña de Galerías de Arte y esta invitación es la primera que realiza fuera de Brasil, lo que la pone muy feliz. “Hacen falta más debates y discusiones sobre estos temas que implican la profesionalización de las galerías de arte y crear mejores vínculos entre México, Brasil y Argentina que tienen una actividad muy fuerte en arte contemporáneo”. Cuenta que actualmente la asociación tiene unas 48 galerías dentro de su ámbito pero que ese número oscila.

Narra la gestación de la misma: “En el 97’ pensamos que el mercado en Brasil era muy activo, con las galerías, las ferias, la misma Bienal, pero a la vez era muy informal. Algunas galerías sintieron la necesidad de comparar el trabajo que cada una hacía, comunicándonos mejor para profesionalizar la actividad. Tuvimos que delimitar y elegimos solamente el mercado primario”. La diferencia entre mercado primario y mercado secundario radica en que dentro del primero están galerías de arte contemporáneo que trabajan directamente con los artistas, representándolos y activando sus carreras; a diferencia del mercado secundario donde se ubican las casas de subastas y las galerías que representan artistas históricos, muchos de ellos fallecidos.

A lo largo de estos años, la asociación ha consolidado sus prácticas, estableciendo un flujo de informaciones que fortalece el vínculo entre coleccionistas, galeristas y artistas. Un equipo de abogados especializados en el área cultura los asesoró y en 2011 hicieron un convenio con la agencia gubernamental APEX, destinada al apoyo a la exportación, no sólo de obras de arte sino de toda la producción brasileña que tiene marca original. Esta agencia además otorga recursos para estimular y facilitar la expansión de la asociación. Así me cuenta nació Latitude “un proyecto que tiene otro comité de galeristas, con una gerencia que trabaja tanto en la asociación como en este proyecto, para facilitar las decisiones”. Este plan ha permitido varios programas, como el “Proyecto de intercambio de curadores que consigue una beca de formación e intercambio con instituciones fuera de Brasil, que sirve además para ellos sean divulgadores de los artistas brasileños. Otro programa es el de Capacitación de galerías pequeñas para que usen herramientas concretas para participar en ferias, insertarse y consolidar sus proyectos.” Pero el que más la entusiasma es la colaboración con la Fundación Getulio Vargas, quien tiene un equipo de investigadores profesionales de enorme prestigio en Brasil, quienes desarrollaron un cuestionario especial para medir la forma en que el mercado de arte se está desenvolviendo ahora, con la intención de desarrollar un plan estratégico con la asociación y fortalecer la actividad. Esta medición les permite fortalecer la meta de profesionalización que está implícita en los estatutos de la asociación de galerías que preside.

Las dos intervenciones fueron realmente un aire fresco para potenciar lo que será la Semana Art Basel Cities 2018, que se llevará a cabo en Buenos Aires del 6 al 12 de septiembre, con la curaduría de Cecilia Alemani y se extenderá como una rayuela en varios puntos de la ciudad.