Nota publicada online
Joaquín y Abel mecenas generosos. Jugadores de toda la cancha, patearon el tablero cuando decidieron rematar su colección y generar nuevos ingresos renovando el apoyo a nuevos artistas para que continúe girando la rueda en nuestra escena. Desarrollan programas en pos del arte federal y en soporte a los artistas emergentes.
Desde Arte Online conversamos con ellos sobre sus inicios en el coleccionismo, sus proyectos y la nueva vivencia estética.
¿Cómo nació el encuentro con el arte, cómo nace su coleccionismo?
- Nunca planeamos ser coleccionistas, no fue una decisión que tomamos en un momento, sino mas bien fue un devenir. En un primer momento fue buscar muebles, objetos y obras para armar nuestra casa juntos. En esa búsqueda inicial, un día en una subasta encontramos una pequeña tinta de Kandinsky que nos atrajo inmediatamente a los dos. Gracias al consejo de Arturo Bullrich, dueño de la casa de subastas, la compramos y esa compra fue el inicio de un conjunto de obras en papel de grandes maestros del siglo XX. Este grupo de obras nos fue acercando hacia el arte contemporáneo y de la mano de un amigo coleccionista empezamos a conocer artistas contemporáneos argentinos. Luego de unos años en los que casi no frecuentábamos galerías, empezamos a ir a arteBA y fue allí donde conocimos muchas galerías y artistas y comenzamos a frecuentar durante el año la escena local.
En algún momento las paredes de nuestra casa se llenaron y eso no detuvo la necesidad de seguir adquiriendo obras. Llegamos a realizar dos colgadas al año para poder rotar las obras y ver las nuevas que iban arribando.
Sobre su colección
- Nunca nos planteamos un criterio a seguir, nos fuimos guiando por nuestros gustos e intuición, le fuimos sumando información y conocimientos adquiridos a veces de manera formal (estudios, cursos, charlas, lecturas, etc) y otras provenientes de la experiencia (visitas a taller, galerías, ferias, museos; charlas informales con coleccionistas, curadores, artistas, galeristas, etc.).
Establecer un foco o línea de coleccionismo para nosotros sería tener que dejar de lado muchas obras que nos interesan y quizás tener que comprar otras que no nos interesan tanto en función de esa línea. Son muchos y muy diversos nuestros intereses, que no tienen una estética o una temporalidad específica, hoy podemos comprar un artista muy joven como uno ya fallecido, una obra perteneciente a un movimiento estético reconocible como otra más indefinida. La riqueza de ideas, técnicas y propuestas de nuestra contemporaneidad es tan grande que siempre hay algo para descubrir, conocer o volver a ver.
La selección es bastante simple, primero hay algo intuitivo que nos atrae y si la materialidad y el concepto son buenos no hay duda, pero si una de las dos es más débil o falta probablemente la dejemos pasar.
Hay primero una reacción física ante la obra, es difícil de explicar, el cuerpo reacciona a distintos estímulos materiales de manera inconsciente que hay que escuchar y luego esa experiencia se va completando con preguntas: ¿quién es el artista?, ¿cómo es su producción? ¿qué galería lo representa? ¿es la más representativa de la serie o de ese momento? ¿Cuál es su precio?, etc.
¿Qué obra redescubrieron en este encierro?
- Nos reencontramos con una pequeña obra de Eduardo Serón, gran artista rosarino, que nos había regalado Marcos Curi unos años antes de su fallecimiento.
¿Colaboran de alguna manera en la producción/construcción de algún artista?
- En todos estos años, siempre que nos ha sido posible, hemos colaborado con artistas y proyectos de exposiciones o formación. En general se trató de facilitar la realización de algún proyectoS específicoS: una exposición, la participación en una bienal, la impresión de un libro, ayudar para una beca de formación o residencia, financiar un programa de formación artística, entre otros. Creemos que apoyando estas instancias contribuimos al fortalecimiento del sistema, aunque no creemos que sea una obligación para quien compre arte, es una decisión personal y tiene que ver con la manera en que nos queremos relacionar con el medio.
¿Cómo adquieren obra?
- La gran mayoría fueron adquiridas en galerías durante el año o durante su participación en alguna feria, en algunos casos que el artista no tenía representación compramos directamente. Cuando comenzamos, todo el grupo de papeles de grandes maestros del siglo XX provino de subastas y de ventas privadas.
Adquirimos algunas obras online, pero son obras que ya conocíamos o que conocemos la producción del artista. Nos cuenta decidir la compra sin la posibilidad del encuentro físico con la obra, que para nosotros es fundamental. Hay cosas que pasan entre la obra y el cuerpo imposibles de reemplazar. Pero lo digital nos sirve para ampliar más el conocimiento y obtener más información sobre el artista, la galería, las obras.
¿Podrían contarnos sobre el Fondo de Artistas que organizaron?
- Desde 2014 organizamos Premio EN OBRA, una iniciativa de Juan Cambiaso para incentivar artistas y galerías jóvenes que se lleva adelante durante las ediciones de arteBA y desde 2018 también durante Mercado de Arte en Córdoba. Es un premio en efectivo no adquisición conformado por donaciones de coleccionistas y amantes del arte. Para la edición 2020, debido a la pandemia y la cuarentena que afectó duramente a los artistas, con la cancelación de la versión presencial de las ferias y de muchos de los proyectos que tenían programados para este año, lo que significó una fuerte baja en sus ingresos, y comenzamos a recibir noticias de que había muchos de ellos que estaban en una situación económica muy difícil. Sabíamos que había que hacer algo y que no había tiempo para perder, por ello reconfiguramos el propósito del Premio y los convertimos en Fondo EN OBRA. En una primera etapa reunimos el dinero para conformarlo, llegando a reunir 600.000 pesos. La segunda etapa consistió en realizar un relevamiento de artistas en la mayor cantidad de provincias posibles, para ellos recurrimos a una red de referentes, con quienes fuimos conformando un listado de posibles candidatos, en una semana realizamos unos 100 llamados para tomar contacto con la situación. No hubo una selección basada en una valoración de la producción sino en las necesidades urgentes que estaban atravesando. En el término de dos semanas pudimos entregar 46 ayudas económicas en 10 provincias del país, que incluyeron tanto a artistas como a colectivos de artistas que se había organizado para ayudarse entre sí.
¿Qué es ser coleccionista?
- Un coleccionista es principalmente un curioso.
Desde nuestro lugar lo que siempre hemos hecho es actuar como un puente, ser vinculadores entre artistas, galerías, coleccionistas e instituciones. Tratamos de entusiasmar a amigos para que se interesen en el arte invitándolos a participar de visitas a museo, asistir a las ferias, apoyar instituciones además de la compra de obra. Organizamos reuniones en nuestra casa para brindar un espacio de vinculación entre diferentes actores: coleccionistas que conocen galeristas y artistas y adquieren sus obras, artistas que conocen curadores y directores de museos, curadores que establecen contactos para proyectos futuros, etc.
Para este 2020 teníamos proyectado poder conocer más sobre la escena nacional, lo que hubiese implicado viajar por el país, obviamente debido a la situación actual ha quedado en espera. También nos interesa poder ayudar al fortalecimiento del sistema del arte, son muchos los diferentes actores e instituciones que lo conforman y que tienen su problemática, desde nuestro pequeño lugar tratamos de apoyar de alguna manera.
¿Hace falta ser millonario para ser coleccionista?
- Por supuesto que no, se necesita curiosidad, tiempo e información.
¿Qué recomiendan para nuevos coleccionistas?
- Mirar mucho, el ojo se entrena. Preguntar mucho, cuanta más información se tenga mejores decisiones se pueden tomar. Ser fiel a los gustos e intereses personales y tratar de encontrar una voz propia. Y por último dar el paso y adquirir la primera obra, es mucho más probable que te arrepientas por lo que no compraste que por lo que sí.