Nota publicada online
La tradicional galería dirigida por Silvia Arrozés promete una temporada imperdible con los más destacados artistas contemporáneos de la región. Fundado en 1998, este espacio desarrolla, desde sus inicios, un dinámico programa de actividades orientados a la promoción de artistas uruguayos, en esta línea de creación.
Desde 2004, año en que inauguró su casa de la playa, en el exclusivo balneario Manantiales en Punta del Este se convirtió en la escala obligada para los amantes del arte contemporáneo durante la temporada de verano.
El 1 de enero, se estrena la temporada de los Gallery Nights esteños con Infinitesimal, una exquisita muestra de los minúsculos y delicados trabajos de Marco Maggi. Este artista nacido en Montevideo que vive y trabaja en Nueva York, cuestiona, a través de una mirada romántica e íntima, el actual sistema de comunicación contemporáneo en el que la cantidad anula la cualidad. “Una sobredosis de drama diaria opera como una anestesia por inundación. La realidad pierde su sentido, se hace ilegible; y las artes visuales, se hacen invisibles.” sostiene el artista; para contrarrestarlo construye confusiones precisas para ser observadas sin la esperanza de obtener información; superficies lentas capaces de estimular simpatía por lo insignificante. “Por eso trabajo hasta pulir una pérdida de tiempo contagiosa, promuevo pausas que permitan mirar con un detenimiento creciente.” Una invitación a detener la marcha y escucharnos.
A partir del viernes 8, el argentino Juan José Cambre nos acerca la “simplificación del paisaje”. Cambre trabaja con la materia prima que le brinda la naturaleza. Registra y documenta imágenes de árboles y follajes, que luego son trasladadas a un lenguaje predominantemente monocromático. En el caso de esta muestra, el azul es la presencia protagónica: invade cada una de las obras en una infinidad de variaciones, se filtra en sus títulos y termina colmando con su enigmática luz el espacio expositivo.
El trabajo de Cambre es extremamente complejo, un larguísimo proceso de sucesivas veladuras. La simplicidad del resultado es, sin embargo, lo más impresionante de su pintura.
El viernes 15 es el turno de Rimer Cardillo, este grabador varias veces galardonado, oriundo del Uruguay, que ha expuesto en Europa, América Latina y Estados Unidos, ha derivado del grabado a las esculturas de medios mixtos como una extensión gradual de temas y materiales que han ido refinándose a lo largo del tiempo. Su interés en el uso de ciertos materiales le ha llevado al descubrimiento de superficies, texturas y fuentes que pueden denominarse arqueológicas. Cardillo se cuenta entre un creciente número de latinoamericanos que están trabajando tanto lo antiguo como lo contemporáneo con un nuevo vocabulario de formas; una nueva estética americana que debe comprenderse para expresar una multiplicidad de significados. Más que un código o un símbolo único, su obra nos ofrece una compleja variedad de significantes. Crea sitios e instalaciones que remiten a una matriz originaria, cerros artificiales, hormigueros, figuras de aluminio o barro que representan semillas, plantas, aves y animales. Su visión enfoca e interroga la interacción actual entre hombre y naturaleza, la sinergia entre Micro y Macrocosmo.
Cardillo se pregunta si el hombre podrá verse a sí mismo como un elemento más de los tres reinos vivos: animal, vegetal y mineral.
El viernes 22 los artistas argentinos Pablo Siquier, Beto De Volder, y Lucio Dorr intervienen Manantiales con la línea, el color y el movimiento.
Siquier desde el plano de la tela avanza con sus formas geométricas inspiradas en la ciudad. Sus sombras proyectadas nos recuerdan al reloj de sol.
Beto De Volder presenta sus construcciones geométricamente caprichosas que se ubican en algún lugar físico, entre la fantasía y el conocimiento exacto. Son formas mágicas en las que aparecen curvas que se transforman en ángulos sin solución de continuidad, líneas que son prismas, intersecciones aleatorias que nos “encantan”.
En el caso de Lucio Dorr, utiliza la sutileza del vidrio como soporte y materia para invadir el espacio.
Durante el último Gallery el 29 de enero, Pedro Tyler de Chile y Ana Campanella de Uruguay, presentan sus trabajos recientes. Tyler, trabaja con reglas de madera y acero para medir todo aquellos que no se puede medir, como por ejemplo el dolor. Tratando de capturar esta fragilidad es que altera objetos de la vida diaria para darles un nuevo sentido.
La obra de Ana Campanella es absolutamente minimalista y nos invita a recorrer un paisaje donde lo femenino tiene un lugar protagónico. Las figuras, llevadas casi a su expresión elemental son dibujadas por la línea que es trazada por hilos de aluminio.