El pasado 31 de Octubre estuvo presente en la Galerí­a Roldán en el Gallery Nights. La artista plástica Martha Minují­n estuvo trabajando en vivo, haciendo obras en platos, en la galerí­a Roldán.

¿Cómo surgió esto de los platos?

Estaba en el aeropuerto internacional haciendo un mural gigantesco y pasó Carlos Monzón y me pidió un autógrafo. Le dije que no, porque no tení­a donde hacerlo (estaba en los andamios). Entonces él se dirigió a un bar que habí­a por allí­ y pidió un plato. Luego sacó un marcador del bolsillo y me dijo: Firmámelo con esto, pero haceme una cara cortada. Y así­ lo hice. Al rato vino otro pidiéndome lo mismo, luego otro y otro, hasta que el bar se quedó sin platos.

¿Qué temática vas a trabajar en ellos?

En los platos trato la misma temática de mis esculturas somos muchos. Una misma persona tiene varias caras, una con su familia, otra con su trabajo, otra consigo misma, otra con sus amigos y otra en la relatividad del tiempo. Las figuras son fragmentadas porque aquí­ los argentinos somos seres muy fragmentados. Al no saber donde vamos a estar parados en el dí­a de mañana, vivimos fragmentadamente.

¿Qué utilidad se puede dar a los mismos?

Los platos son para comer y estos platos son para mirar. Es decir pasan de la mesa a la pared.
Con los platos se pueden hacer tres cosas: poner varios en una pared, otra posibilidad es comprar uno y colgarlo en tu casa y otra es poder cometer una acción de arte moderno. Por ejemplo fui a un programa de televisión a darle un plato al secretario de cultura y cuando lo iba a hacer, lo rompí­.
Además son obras originales mí­as y no es necesario enmarcarlos para lucirlos.

¿Qué precio tienen?

Los platos pueden ser baratí­simos, los puedo llegar a regalar o cobrarlos carí­simo. De hecho el tiempo que tardo en hacerlos es variado: algunos me llevan sólo un minuto y en otros, tres dí­as. Pero ahora los voy a vender a $600. Eso es lo que pautó el Banco Ciudad.

Además de los platos ¿Vas a exponer algunas de tus esculturas?

Sí­, aparte va a ver una mini retrospectiva mí­a, porque la gente se olvida que empecé a los 11 años haciendo escultura.
Entre las obras habrá: un autorretrato mí­o que hice a los 11, una pintura maravillosa llamada Surrealismo metafí­sico que hice en la Escuela de Bellas Artes cuando tení­a 16 años, va a ver un colchoncito de colores y también mi primera escultura junto con otras. Y los platos. Platos, platos, muchos platos.