Marilina Etchichury trabaja en tintas sobre papel y en acrílicos sobre tela. Su fuerte es el dibujo que por momentos trae a la memoria las aguatintas del Miserere de Rouault, lo que no es poco decir.
En El recreo de 120 por 100 cms., un grupo de mujeres descansa, lo que no impide el nervioso trazo del pincel. Bien dijo Aldo Galli: Define en su configuración oposiciones que juegan con recursos tan limitados como los valores extremos del blanco y el negro en los trabajos con tintas. Destaco el logro del Tango donde el color apenas se insinúa dejando así libre el contraste dramático.
Marilina Etchichury puede ser considerada una destacada figura de la Escuela de Buenos Aires que supo aprovechar las enseñanzas de Sbernini y de Miguel Dávila. Tiene calidad y fuerza.