Zamora Arte
Guido 1831, CABA
con curaduría de Miguel Angel Giovanetti
Desde la Geometría
por Raúl Santana*
En las pinturas de Silvia Goñi, de máxima claridad formal, en las que óvalos y círculos son las unidades básicas que componen la maraña de las figuras, entramos en sus formas vivas: Aquietadas cuando están centralizadas en el cuadro, o desplazándose vertiginosamente por el plano, como buscando otros espacios. Las figuras se recortan contra la superficie. Pero no asistimos al concepto tradicional de forma y figura, pues la elección de los pigmentos interacciona para que el fondo este tan vivo como la figura, entablando una secreta lucha. El color canta su propia gloria con rimas, cantos y contracantos en un intenso diálogo sobre la superficie. Por otra parte, las pinturas de Goñi manifiestan una afección muy contemporánea: La Temporalidad, ese tiempo que todo lo devora en el vértigo de la vida actual. No es casual al respecto, que la artista haya elegido como el GERMEN de sus pinturas la forma Oval y el Círculo, que al parcelarse en formas rectas internas a las figuras , acentúan todavía más la velocidad de sus curvas. Y aunque las obras de la artista parecieran jugadas hacia lo inorgánico, en algunos de sus cuadros las figuras aparecen como signos cristalizados de lo humano, pues esos Antropomorfismos y Zoomorfismos que son evocados desde las formas puras de la geometría y producen una secreta síntesis entre lo orgánico y lo inorgánico