Cachimayo 517, esq. Pedro Goyena, Caballito.
Un proyecto de arte realizado entre nonna y nieta que reúne nuestras raíces nutriendo una nueva.
Es una idea basada en el amor, el respeto mutuo dentro del vínculo y el deseo compartido de pintar, jugar con los colores, las ideas, las formas y los sentimientos.
Es una idea de inclusión de las diferencias generacionales alimentadas por este vínculo tan especial que brinda la abuelidad.
Mi nieta nace entre colores, vive rodeada de ellos, pinta desde siempre con papá y mamá y en el taller de la nonna con gran felicidad y placer. Me sabe pintando siempre, con la pasión que me impulsa cada día y comparte conmigo pinceles, atriles, pinturas de todo tipo y ocurrencias miles.
Creo en la belleza de la relación abuela-nieta y en el mutuo aprendizaje. Ella me hizo abuela por primera vez y entonces vi lo hermoso que es, tan distinto a la maternidad pero tan inmenso como ella.
Me decidí a proponerle un trabajo juntas, un proyecto de arte como dice ella, entre las dos.
Nos gustan los colores de nuestra tierra, de nuestra cultura, la originaria y la mestiza.
No hay un fin, no sabemos todavía lo que sigue, pero dibujamos y pintamos en enormes telas, recortamos pájaros que vuelan sobre un tul, diseñamos ponchos y a veces ella sólo interrumpe para dar unas vueltas carnero y volver.
Curadora: María Sol Marcelloni