María Florencia Pinós en La casa de las culturas
Entrelíneas. Abstracciones y más
10/02/2017 - 10/03/2017
María Florencia Pinós en La casa de las culturas

La armonía de los colores debe fundarse únicamente en el principio del contacto adecuado con el alma humana, es decir, en lo que llamaremos el principio de la necesidad interior.” 

Wasilly Kandinsky

El Batik es una técnica de reserva, donde se preserva en negativo lo que no se quiere pintar. Este traspaso comienza dibujando con cera derretida sobre telas de fibras naturales; aplicando capas de cera caliente, para imprimir los colores a través de las tinturas sumergiendo las telas en baños de color.

Las imágenes sensibles toman la fuerza de esta técnica milenaria que viene desde china, india, el antiguo Egipto, ya hemos perdido su origen, se presume que radica en la Isla de Java. La habilidad de hacer bellos Batiks fue  considerada una señal de refinamiento. Tal refinamiento es el que nos entrega la artista en cada una de sus obras.

La presente exposición centra su interés sobre aquellas obras que prescinden de la figuración, donde la artista se vale de las formas que logra a través de la línea y el color para crear sus composiciones. Si bien la abstracción en arte tiene sus comienzos a principios del Siglo XX con la aparición de las Vanguardias, no podemos obviar la infinidad de formas estilizadas y geométricas utilizadas por las diferentes culturas prehistóricas en el nacimiento de la historia del arte. 

No debe ser  casual que la artista haya comenzado sus primeros batiks trabajando en la  representación de arte rupestre y su iconografía, para llegar hoy a la abstracción existente, pero nunca dejando de lado su trabajo más representativo: infinitas series de sillas. 

Al recorrer su trabajo, podemos quedarnos en el goce estético de la contemplación ante lo delicado, femenino y bello de sus obras;  o podemos además mirar entre líneas.  Cada una de sus sillas nos enfrenta a la soledad, a la ausencia, al vacío, a la espera. Nos invita a conectarnos emocionalmente con nuestra propia experiencia; o en sus abstracciones, donde la subjetividad se vuelve tangible.

Vanesa Catellani. Curadora