Av. del Libertador 16.208, San Isidro
Central de Procesos, inauguró en forma oficial Colibrí, proceso de una escultura, una experiencia de juego y reflexión acerca de los caminos creativos de Colibrí, la obra de Marcela Cabutti emplazada el año pasado en Boulogne
Desandar las sendas creativas tomando como herramientas parte de las que Marcela Cabutti utilizó para llevar adelanteColibrí, emplazada en la rotonda de Camino Real y Panamericana, Boulgone, es parte de la nueva iniciativa de Central de Procesos. Desandar haciendo, jugando y reflexionado, de eso trata Colibrí, proceso de una escultura, que estará abierta hasta el 30 de julio próximo, con acceso y participación gratuita, en Libertador 16.208, San Isidro.
“Las otras cuatro obras que forman por ahora nuestro programa de instalación de esculturas en el espacio público tenían un lugar específico y un tema.Colibrífue la única que carecía de tema y Marcela fue a buscarlo al Barrio San Isidro, donde transitó un camino muy enriquecedor que hoy celebramos trayéndolo a Central de Procesos, un ámbito de aprendizaje, reflexión y diálogo que nos acerca a su poética desde la acción”,explicó en la apertura de la muestra Eleonora Jaureguiberry, subsecretaria general de Cultura de San Isidro.
De entrada, un video nos acerca a la metodología de trabajo de la escultora. Luego, tres salas diseñadas por el departamento educativo de Central de Procesos, junto con Cabutti, en las que la consigna es hacer en distintas estaciones lúdicas y reflexivas, desplegadas en largas mesas, con hilos de lana entramados, marcadores, tijeras, papeles, cartones y otros materiales comunes en el proceso creativo de la escultora.
Mitos y relatos sobre el colibrí también son disparadores de textos producidos por la visita que ya están sumando y enriqueciendo la propuesta en amplios murales, en una actividad coordinada por la gestora cultural Fabiana di Luca.
“La metáfora del colibrí, que simboliza a los seres queridos que vienen a visitarnos y decirnos que están bien, me pareció esperanzadora, generosa y colorida para esa rotonda que mira al cementerio. Un colibrí a gran escala, de seis metros, que toma vuelo sobre los barrios linderos y ahora, a su modo, también llega a Central de Procesos”,dijo Cabutti, que realizó talleres con alumnos de las escuelas del populoso Barrio San Isidro para que se apropien de la obra, conozcan y sean continuadores de ese mito tranquilizador.