Los equilibristas de Graciela Bello vuelven a escena…nada más ni nada menos que al Teatro Colón.

Existe hoy en día, una pequeña confitería, "escondida" en el antiguo Pasaje de los Carruajes, esa angosta callejuela que atraviesa el Teatro Colón para comunicar dos calles. Ese pasaje había sido diseñado originalmente para que los días de lluvia las damas no se empaparan el ruedo del vestido y, en vez de acceder por la entrada principal de la calle Libertad, bajaran del coche directamente al foyer del teatro.

El proceso de restauración del Colón culminó con la reapertura para los festejos del Bicentenario de la Argentina, en mayo del 2010. Y felizmente este café conserva los pisos de teselas, carpinterías y artefactos de iluminación originales. La única intervención fue la apertura de dos ventanales para darle visibilidad. Hoy, en este mágico entorno se pueden ver algunos de los personajes, arlequines, bailarinas, mascaritas y funambulistas que Graciela Bello imaginó suspendidos en el aire, en sus paisajes oníricos.

La muestra estará abierta todos los días de 9 a 17 hs, los días de función hasta las 20 hs.