Ungallery
Arroyo 932, Buenos Aires
La obra se nutre de clorofila la de la vegetación del monte paranense atravesada por la escala cromática de luces y pigmentos para recrear nuevos mundos posibles. En este trabajo, Juan Jiant (Martín Coronado-Provincia de Buenos Aires, 1994) nos introduce a su universo onírico que se entremezcla con la contaminación urbana y la maleza para dar paso a una atmósfera llena de criaturas amorfas, aguijones volumétricos que se despliegan por el espacio de la salas. Estos seres invitan al espectador a vivir las dualidades que se ponen en juego en cada pieza: realidad y ficción; naturaleza versus urbanidad; flow u obsesión; analogía & virtualidad.
Al igual que como ocurre con los haikus (poemas japoneses formados por tres estrofas) en donde el poeta trata de expresar de forma sintética lo que acontece en un instante, las obras de Jiant nos hablan de las contradicciones de la vida cotidiana urbana a través de la creación de sus compostajes cromáticos
La camelia en el suelo
ha vaciado de ayer el aguacero
Yosa Busón
A su vez, Maleza Croma busca que nos detengamos a reflexionar de un modo lúdico sobre el impacto de lapresencia humana en entornos naturales. En este sentido los haikus unen elementos aparentemente irrelevantes para situarnos en los movimientos de la naturaleza y sus símbolos. En ambos casos, hay una
lectura poética del mundo natural y un gesto para resguardarlo.
En esta propuesta expositiva, Juan explora -de modo casi obsesivo- los lenguajes y texturas pictóricas, escultóricas y digitales: salta de un render al trabajo manual en resina con tanta facilidad que las dimensiones analógico-digital son el linde y la materialidad de sus obras. Así, las piezas expuestas en esta oportunidad,
permiten que Jiant experimente con las transformaciones morfológicas de organismos biológicos y elimpacto que se genera en los ecosistemas tras el paso de la presencia humana. Las esculturas corporizan como juglares visuales su preocupación por cómo el ser humano padece, habita y se relaciona con la
naturaleza y su modo destructivo de vincularse.
Natalia Albanese