´Los fantasmas de Corea´ Homenaje a la primera inmigración de Alejandro Raineri inaugura el jueves 26 a las 19hs.

Corea, 1965

Ellos, nunca se fueron del todo...

Y ellos, nunca llegaron completos...

La muestra se compone de trece dípticos en los que las imágenes se relacionan entre sí a través de la emigración/inmigración de los personajes, en estado de “no integración”. Los protagonistas aparecen en franco contraste con el “entorno” como reflejo de lo difícil que resulta la adaptación del inmigrante, sea un ámbito desconocido o la readaptación al ámbito original. 

La migración según el artista

El desarraigo es una de las fracturas que los inmigrantes tienen que sobrevivir.

Por diferentes motivos deben dejar atrás todo tipo de lazos y sólo podrán empacar su esencia.

Apenas con un pasaporte atraviesan las puertas de alguna Tierra Prometida.

La esperanza de algo mejor y los temores, son compañeros fieles durante ese camino.

Esos viajeros sólo pueden refugiarse en las reglas de la adaptación.

Todo comienza a ser incierto, desconocido, donde pocas preguntas encuentran respuestas.

La energía de ausencia queda aferrada al sitio al que pertenecieron mientras ellos se corporizan en algún “paisaje opuesto”.

Poco a poco aquellos lugares serán reemplazados por el olvido.

Su mente permanece en la nostalgia, su cuerpo en el presente, y el futuro se llena de historias recurrentes.

Podrán regresar pero ya no serán los mismos.

Podrán volver a encontrarse con su pasado pero quizá no sean reconocidos.

Se convierten en fantasmas que deambulan sobre las rutas del desarraigo.

Los inmigrantes “nunca abandonan del todo” para “nunca integrarse completos”.