Nota publicada online
Perder la forma humana, la muestra que puede verse hasta el 10 de agosto en el CAC Muntref, nos invita a sumergirnos en la poética contestaría, rebelde y profundamente política que marcó el fin de los regímenes totalitarios en América Latina.
Desde la curaduría se propone que durante esos años -la muestra comienza formalmente en 1973, año del golpe militar de Pinochet en Chile y se extiende hasta 1994 cuando el zapatismo refunda el activismo a nivel internacional- hubo denominadores comunes en América Latina. Prácticas artísticas que se apropiaron de los espacios urbanos, vinculadas a movimientos sociales, la escena underground o grupos marginales.
Con la premisa de “establecer un contrapunto entre los efectos arrasadores de la violencia sobre los cuerpos y las experiencias radicales de libertad y transformación que impugnaron el orden represivo”, el corpus seleccionado para esta muestra está conformado por 600 obras, en su mayoría documentos -fotos, serigrafías, piezas gráficas, instalaciones, registro de performances- que dan cuenta de estas experiencias fugaces pero sumamente vivaces.
El minucioso trabajo de investigación documental que realizó la Red de Conceptualismos del sur permite reponer el espíritu de esta época: la alegría que produce el retorno a la democracia, la búsqueda de la libertad sexual, la estéticaqueer, elpunky elrock. Uno de los gestos curatoriales más notables de la muestra es otorgarle valor estético y documental a producciones que en muchos casos no los tuvieron originalmente.
En sala pueden verse los trabajos de El Siluetazo, movimiento que lleno la ciudad de Buenos Aires de siluetas vacías un mes antes de las elecciones de 1983. La convocatoria NO +, un slogan del colectivo chileno CADA, que se planteó como una invitación abierta a los ciudadanos de Santiago para que, a diez años del golpe de Pinochet manifestaran los reclamos en oraciones que comenzaban con el símbolo NO +.
Estas obras, junto con los registros de la Cueca de Pedro Lemebel bailada entre dos hombres sobre un mapa de América Latina cubierto de vidrios, la performance Bienvenidos al Circo que realizó Ral Veroni en 1989, la recreación del Hombre de Arena del Periférico de objetos; se articulan en la primer sala de la exhibición: Hacer política con nada. El cuerpo, como objeto plausible de ser transformado en obra se vuelve categórico y es la clave para recorrer el resto de la exhibición. En palabras de Ana Longoni: “da cuenta de cómo el soporte, cuando no se tiene otra cosa, es el cuerpo tanto para mostrar la violencia arrasadora como para expresar la búsqueda de libertad”
Mutilado, intervenido, disfrazado, expuesto; el cuerpo libre del artista se vuelve palpable en la sala dedicada a las desobediencias sexuales. Fotografías orgiásticas, que en algunos casos rozan lo abyecto generando incomodidades y, seguramente, objeciones. El diseño de montaje es acertado en esta sala pequeña, que obliga a estar próximo a los demás espectadores. Es sin dudas un punto de inflexión en el recorrido dePerder la forma humana, una tensión que se disipa en la sala dedicada alpunky la anarquía, ambientada con música de Los Redondos y Sumo, en donde se pueden ver registros fotográficos de bandas punk que signaron la escenaunderpor esos años.
Un poco de historia
Perder la forma humana es un proyecto curatorial de la Red Conceptualismos del sur, un equipo conformado investigadores y artistas de distintas latitudes latinoamericanas. Lo coordinan entre otros las argentinas Ana Longoni y Mabel tapia, la brasileña Fernanda Nogueria y la chilena Fernanda Carvajal. Una de las virtudes de este trabajo colectivo es que permitió trazar una cartografía más amplia y abarcadora sobre esos años en América Latina.
Originalmente fue organizada para el Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía en donde se exhibió a fines de 2012 y antes de desembarcar en el CAC Muntref de Buenos Aires pasó por museo Mali de Perú a principios de 2013.
El título de la muestra surge de una reflexión del Indio Solari. Una frase que utilizó para describir la experiencia de los primeros recitales de los Redondos, cuando eran sólo 80 personas y no había límite entre el escenario y el público: “la idea era perder la forma humana en un trance que desarticule las categorías vigentes y provea emociones reveladoras”, decía Solari.
PERDER LA FORMA HUMANA
Martes a domingos de 11 a 19hs.
Visitas guiadas: lunes a viernes a las 15hs.
Sábados y domingos a las 17hs.
MUNTREF – Centro de Arte Contemporáneo
Av. Antártida Argentina 1355
Más info: muntrefcac@untref.edu.ar